No puedo ser. Nuestra cantante favorita de The Voice, Michelle Chamuel, se ha quedado a las puertas de conseguir un contrato discográfico en la cuarta edición del programa en Estados Unidos. La ganadora ha sido Danielle Bradbery, un prodigio vocal de tan solo 16 años, que seguramente seguirá los pasos de Taylor Swift y acabará convirtiéndose en un referente de la música country.
Os comentábamos la semana pasada que iba a ser muy complicado que ganara Michelle debido al tirón que tiene el género country en este programa. Y es que no parece casualidad que Blake Shelton haya ganado The Voice tres veces seguidas, sabiendo que su equipo está compuesto por un 99.9% de cantantes country. Nuestro countrydar pita alocadamente con la edición más yankee de La Voz, pero como es su programa, a nosotras, observadoras externas, no nos queda más remedio que acatar los gustos de los americanos.
De todos modos, estamos muy orgullosas de la trayectoria que ha tenido nuestra concursante LGBT, que ha conseguido quedar en un respetable segundo puesto. Queda por ver si su química con Usher se traducirá en algún contrato discográfico, aunque sea uno muy pequeñito. Tampoco sería algo descabellado. En España tenemos a Bisbal y Bustamente, las insólitas pruebas vivientes de que incluso los segundones de estos programas pueden triunfar. Además, estoy segura de que a Michelle Chamuel no le faltarían fans dispuestos a comprar su disco.
Pero la verdadera ganadora de esta edición es Shakira, porque su popularidad se ha disparado tras su participación como jueza en el programa y es ya uno de los rostros favoritos de los estadounidenses. Bien por Shak, y bien por todos los hispanos, que han tenido en ella a una gran embajadora de nuestra cultura.
@unachicademarte