La morena que nos ocupa esta semana es, nada más y nada menos, que Cheryl Ann Fernandez-Versini, más conocida por Cheryl Cole (aunque definitivamente ya no se llame así, ya que tomaba el apellido de su ex marido, el futbolista Ashey Cole). Cheryl saltó a la fama cuando ganó el Popstar: The rivals junto con otras cuatro chicas más, y juntas formaron un grupo que estaba llamado a suceder a las mismisimas Spice Girls: Así nacían Girls Aloud.
Durante más o menos diez años, estas cinco chicas arrasaron en Reino Unido, llenando estadios y dando a los tabloides historias casi día si día no: Que si Nadine se lleva fatal con todas, que si Sarah debería ir a rehab, que si Cheryl y Kimberley son más que amigas… Ay, qué tiempos. En 2009 Cheryl lanza su primer disco, apadrinada por Wil.I.Am, de Black eyed peas, y se convierte a su vez en jurado de X Factor. Y hasta hoy.
Pero aparte del inmenso talento que tiene encima del escenario, donde es una auténtica pasada verla cantar y bailar, la de Newcastle es guapísima y super fotogénica, cosas que muchas veces no van de la mano. Ya sea con una sudadera rollo ir a comprar el pan o con el estilismo más elegante que te puedas imaginar, ella está bien con todo. O a nosotras nos lo parece, vamos.
Cheryl hace que se nos caiga la baba a unos límites más allá de lo decoroso. Nos funde los circuitos a niveles estratosféricos. Por eso, es nuestra morena del domingo.