Lo nuevo de Sizzy Rocket, quien ya saltara a la fama con su twist feminista de la canción de Beastie Boys Girls, es un temazo que se disfruta desde la primera escucha. Sintetizadores estilo Goldfrapp con una pizca de Charlie XCX y de Scissor Sisters, cuyo componente Babydaddy es productor y escritor del tema, hacen de Beastie, en el plano musical, un trallazo espléndido para este verano que tenemos prácticamente en las narices. Peor lo que más nos llama la atención no es el componente musical, sino la letra, la historia que cuenta. Sizzy, que se ha basado en una historia personal, habla de cómo, una noche de fiesta con su mejor amiga, con quien había salido para intentar consolarla tras su ruptura con su novio, empieza a sentir que, a lo mejor, le apetece hacer algo más que bailar con ella. Bueno, la letra es un poco más explícita que todo eso:
Oh Dios mio, está increíble
lleva un vestido super ajustado
está bailando con sus muslos alrededor de mi
y entonces me doy cuenta:
Me quiero follar a mi mejor amiga
Esperaré hasta que ella también quiera follar conmigo
(…)
Oh Dios mio, está fantástica
la veo mientras sigue moviendo el culo
No puedo dejar de imaginarla teniendo un orgasmo
Quiero probar, quiero probar
No ha faltado quien la ha comparado con I kissed a girl, de Katy Perry, pero la verdad es que poco tienen que ver. Mientras que Katy besaba a una chica que no conocía de nada, y le quitaba importancia, diciendo que no era para tanto porque era otra chica (si hubiera sido un chico ya serían palabras mayores para su novio, al que sí le hubiera importado), Sizzy es muy, pero que muy consciente de lo que le está pasando, de las sensaciones que le está produciendo ver a la otra chica con un vestido y contoneándose delante de ella, y le apetece realmente acostarse con su amiga, por puro placer personal. Son conceptos diferentes. El video, por otra parte, no tiene desperdicio, con alegorías más que evidentes al sexo, y con una estética de gimnasio ochentero que nos gusta mucho.
En unas declaraciones, la cantante ha expresado que siempre son los chicos en las canciones los que muestran su deseo sexual, sus ganas de conquistar a las chicas. Son womanizers, como en la canción de Britney Spears. Ella ha querido darle una vuelta de rosca al cliché, y convertirse ella en el sujeto activo, confiada, segura, y que coge lo que quiere.