El Párrafo 175 del código criminal alemán, que el régimen nazi revisó en 1935 para endurecer las ilegalidades del comportamiento entre hombres, no menciona en ninguno de sus apartados el lesbianismo, porque, como apunta el Holocausto Memorial Museum de Washington, “el lesbianismo era visto para los oficiales nazis como algo ajeno a la naturaleza de la mujer aria”. Aunque esto no quiere decir que las mujeres lesbianas no llegasen a campos de concentración, la mayoría de las veces arrestadas bajo las denominaciones de “asociales” o prostitutas.
Así que es difícil contabilizar las mujeres lesbianas que fueron víctimas del régimen nazi: según los datos de este museo, del total de víctimas o encarcelados en los campos de concentración, que estiman fueron entre 12 y 15 millones de personas –como si sumásemos las actuales poblaciones de Andalucía y la Comunidad de Madrid–, los homosexuales fueron “cientos, posiblemente miles” del cómputo total. Los hombres, en su mayoría, porque para las mujeres tendríamos que ver las cifras de “asociales”, que fueron al menos 70.000, personas no productivas y socialmente inapropiadas, una amplia categorización en la que también entraban, por ejemplo, personas alcohólicas o con enfermedades mentales.
Muchas de las mujeres lesbianas encarceladas como asociales, locas o prostitutas, acabaron en el campo de concentración de Ravensbrück, a 90 kilómetros de Berlín, un campo destinado a mujeres jóvenes y niñas. La periodista británica Sarah Helm ha hecho un exhaustivo repaso por la historia de este campo de concentración femenino en su libro Ravensbrück: Life and Death in Hitler’s Concentration Camp for Women, un campo por el que pasaron 130.000 mujeres de veinte países europeos, entre ellas, estas mujeres lesbianas:
Henny Schermann (1912, Frankfurt, Alemania)
Hija de padres judíos, Henny Schermann trabajaba a los 24 años como empleada de un negocio y vivía en Frankfurt con su familia. A comienzos de 1940 fue arrestada en esa ciudad alemana y deportada al campo de concentración Ravensbrück. En el dorso de su fotografía de prisionera rezaba: “Vendedora soltera de Frankfurt del Meno. Lesbiana licenciosa que solo visitaba esos bares [de lesbianas, que fueron cerrados por el régimen]. Evitaba el nombre de ‘Sara’ [una ordenanza nazi decretó después de 1938 que en todos los documentos oficiales se le agregara ‘Sara’ al nombre de todas las mujeres judías para poder identificarlas]. Judía apátrida”.
Tras su ingreso en Ravensbrück, en 1942 fue seleccionada por uno de los doctores “de la muerte” nazis, Friedrich Mennecke, y ese mismo año Henny fue asesinada en la cámara de gas del centro de exterminio de Bernburg a los 30 años.
Elli Smula (1914, Berlín, Alemania)
Elli Smula fue revisora de billetes de tranvías, y fue precisamente la empresa Berlin Public Transport (BGV) la que la acusó a la Gestapo por tener relaciones sexuales en fiestas con compañeras de trabajo sin presentarse al trabajo al día siguiente. La Gestapo detuvo a Elli el 12 de septiembre de 1940 y el 30 de noviembre fue enviada a Ravensbrück, y en la documentación oficial se explica que fue detenida como “prisionera política” junto a la palabra lesbiana.
En una nota de la Gestapo del mes en el que fue detenida, se lee: “El BGV ha denunciado que, en la estación de Treptow, están empleadas algunas revisoras de tranvía que tienen relaciones de carácter lésbico con las compañeras de trabajo. Así, se ha afirmado que llevan a su vivienda a las compañeras de trabajo, las emborrachan y luego tienen relaciones sexuales de tipo homosexual con ellas. Al día siguiente las mujeres no estaban en condiciones de realizar su servicio. Por esta razón, el servicio de tranvía en la estación de Treptow se vio en peligro grave”.
Se sabe muy poco del tiempo que Elli pasó en el campo de concentración femenino, pero después de la guerra su madre escribió que la joven “murió de repente” en Ravensbrück el 8 de julio de 1943, a los 29 años. En noviembre de 2015 el artista alemán Gunter Deming le dedicó un Stolperstein –cubos de cemento conmemorativos para las víctimas del Holocausto– en el número 1 de Singerstraße, en el centro de Berlín.
Mary Pünjer (1904, Hamburgo, Alemania)
Hija de comerciantes judíos de Hamburgo, Mary nació con el apellido Kümmermann pero adquirió el de su marido, Fritz Pünjer, cuando se casaron en 1929. Mary trabajaba en el la tienda familiar de ropa para mujeres en el distrito Wandsbek de Hamburgo, aunque sus padres tuvieron que renunciar a su negocio por el régimen nazi. Su familia consiguió escapar de Hamburgo, pero ella fue arrestada el 24 de julio de 1940, probablemente en una redada de un bar de lesbianas.
Pasó al menos tres meses en custodia policial en el campo de Fuhlsbüttel, y finalmente el 12 de octubre de 1940 fue enviada a Ravensbrück, según la documentación oficial, “por sus diferencias políticas y porque era lesbiana”. En 1941 los nazis decidieron asesinar a prisioneros de campos “seriamente enfermos” que fueran incapaces de trabajar, lo que denominaban “lastres”.
Mary, al igual que el resto de mujeres de Ravensbrück que entraban en esa categoría, fue enviada al campo de Bernburg, cerca de Dessau, que se había convertido en un “hospital” para asesinar a gente enferma y practicarle la eutanasia a personas minusválidas. Mary fue asesinada en la cámara de gas del “Hogar de convalecientes y enfermos” de Bernburg, probablemente en el mes de mayo de 1942. Al igual que Elli Smula, Mary fue conmemorada con un Stolperstein en el distrito de Wandsbek de Hamburgo.
Rosa Jochmann (1901, Viena, Austria)
Cuando Rosa Jochmann tenía 14 años su madre murió, y su padre lo haría también en 1920, cuando la joven tenía 19 años. Ese mismo año Rosa se convirtió en la representante sindical de una fábrica que hacía cubiertas de cristal para lámparas de gas. Se unió al movimiento sindical y al Partido Laborista Socialdemócrata (SDLP), y a comienzos de la década de los años 30, como uno de los miembros más importantes del partido, su ideología política le puso en el punto de mira del régimen nazi. En 1938, cuando la Alemania nazi anexionó Austria, Rosa rechazó huir de su país natal; fue detenida varias veces, hasta que en marzo de 1940 la enviaron a Ravensbrück.
En el campo continuó su vocación de servicio público y se convirtió en mediadora entre los prisioneros y las autoridades del campo. Recibió un trato duro en Ravensbrück, pero sobrevivió a la guerra, y cuando las tropas soviéticas liberaron el campo en 1945 se quedó para cuidar a los heridos. Fue nombrada ciudadana honorífica de Viena y cuando murió en 1994 por un ataque al corazón, se le concedió una tumba de honor en la ciudad. Su orientación sexual fue un secreto hasta 2005, cuando fue identificada como lesbiana en una exposición sobre su vida y sobre la persecución de las personas homosexuales.
Marie Glawitsch (1920, Graz, Austria)
En septiembre de 1939, a los 19 años, Marie Glawitsch fue condenada a seis meses de prisión por violar el párrafo 129 del código penal austriaco, el referido a los castigos por comportamientos homosexuales, denominados en el código como “fornicación con alguien del mismo sexo”.
Cuando la joven tenía 22 años, el 31 de octubre de 1942, fue enviada a Ravensbrück por haber hecho “carrera criminal”. Marie sobrevivió al campo de concentración, y murió a los 46 años en 1966.
Inge Scheuer (1924)
Inge Scheuer fue reclutada en 1943 en el servicio militar como “Asistente Marítimo”, pero fue suspendida de su puesto por mantener una relación con una compañera. En marzo de 1944 fue enviada el hospital psiquiátrico de Brandenburg-Görden por la oficina de salud de Angermünden. Por su “tendencia al mismo sexo” fue enviada más tarde a Ravensbrück, pero salió a las seis semanas y Inge sobrevivió a la Segunda Guerra Mundial.
Superviventes del campo de Ravensbrück en 1958.
Vía: Holocausto Memoriam Museum | Collectif & Réseau Féministe “Ruptures”