Tras toda la revolución que hemos vivido esta última semana, Cuentos de buenas noches para niñas rebeldes es, de nuevo, mi libro de cabecera. Este texto, firmado por Elena Favilli y Francesca Cavallo, contiene una lista inmensa de mujeres que han conquistado el mundo, con o sin capa.
Desde su dedicatoria leemos el llamamiento para las lectoras: soñad en grande, luchad con fuerza. Mujeres reconocidas como celebridades aparecen con sus grandes historias, desde Evita Perón hasta Jane Austen. La candidata a la presidencia Hillary Rodham Clinton rompe con la idea de las profesiones masculinas: “A todas las niñas con grandes sueños les digo: sí, podéis convertiros en lo que queráis, incluso en presidentas”.
Hay lugar para las aventuras y los personajes intrépidos, como la pirata Jacquotte Delahaye, quien afirmó “No puedo amar a un hombre que me mande, como tampoco puedo amar a quien se deje mandar por mí”. Todos los tipos de profesiones están recogidas en esta obra, desde espía (¡la historia de Nancy Wake es tremenda!) hasta chef, rapera o faraona. “Cuando las niñas vean a otras mujeres haciendo este trabajo, sentirán que ellas también pueden hacerlo”, reza el cuento de la directora de orquesta Xian Zhang.
Favilli y Cavallo no olvidan a las rebeldes anónimas, quienes han llenado con sus historias algún rincón del mundo. Coy Mathis, la alumna de primaria trans. La tatuadora que soñaba con salir del circo. La bióloga marina que hablaba del corazón de la tierra. Todas ellas tienen cabida en un libro lleno de cuentos para leer antes de ir a dormir.
La literatura infantil (aunque en esta ocasión, yo la recomendaría para todos los públicos) está cambiando el mundo. ¡Ya no vale decir que las niñas no pueden hacer lo mismo que los chicos! Croqueta, extranjera, anónima o reconocida, el espacio de las niñas rebeldes conquista, ¡y no para de crecer! Podéis comprar el libro aquí.