Este juguete que os voy a enseñar hoy tiene que estar en el top 10 de los más originales, como mínimo. Os vais a pensar que tengo un fetiche con los vibradores que recrean alimentos, pero no. De momento. Como sigan fabricando cosas como esta igual sí. Resulta que yo estaba en busca y captura de juguetes diferentes, curiosos, y di con el macaron vibrador de Tokyo Design.
Por mucho que parezca lo más adorable y dulce que habéis visto, no se come. Tras esa apariencia inocente se esconde un motor bastante potente con 3 modos y 3 intensidades de vibración. Y os tengo que confesar que, para lo pequeñito y discreto que es, no podemos quejarnos de las vibraciones. La interfaz es sencilla: tiene un solo botón que te permite moverte por las diferentes opciones de vibración:
El tacto es muy agradable para la piel, sedoso, fabricado en silicona médica. El macaron está diseñado de tal manera que puedes sumergirlo en la bañera, en la piscina o donde más te apetezca. Por si fuera poco, también es recargable, para que no tengas que estar pensando en que es domingo y no tienes dónde ir a comprar las pilas. El agujerito para cargarlo está un poco escondido, mira:
Está tan oculto porque lleva un mecanismo para que no le entre agua cuando lo vas a usar en condiciones más húmedas. Aunque te parezca que la clavija para cargarlo no cabe ahí, sí que cabe. La primera vez que la introduzcas dentro será extraño, como desvirgar a tu vibrador. Pero don’t worry, está todo bien.
Con una carga completa podrás usarlo durante una hora y media (comprobado) para endulzar de placer todas tus zonas erógenas. Reconozco que es un poco complicado encontrar la posición ideal si lo quieres usar sobre el clítoris, pero todo es práctica. Como el mismo juguete tiene varias texturas, como por ejemplo los ribetes que imitan el relleno, puedes colocarlo como te guste más. Además, puedes utilizarlo también en pareja para estimular el cuerpo de tu chica de una forma discreta: al ser tan bonito no es como utilizar un vibrador realístico que a muchas nos corta un poco el rollo.
El macaron está disponible en varios colores: caramel, mint, raspberry, rose y violet. Solo tienes que elegir el que más te guste. A mí me parece que el mint es de los más bonitos, tengo una pequeña obsesión con ese color…
Además, el packaging es superoriginal: viene en su cajita en forma de tubo muy bien colocado. A mí la caja me tiene enamorada.
El inconveniente que podría sacarle al macaron de Tokyo Design es que no es tan silencioso como otros masajeadores externos que he probado. No obstante, hay que tener en cuenta que es un vibrador sencillo con un precio muy muy asequible y no podemos pedirle que esté tan calladito como uno de 150 euros. En cambio, podéis conseguir el macaron por 35 euros, un muy buen precio porque es recargable, sumergible y considerablemente potente.
Por último, solo quiero añadir que es un juguete ideal para chicas que quieren empezar en el mundo de los juguetes eróticos y no saben cómo. Es el mejor vibrador para tener por casa de forma discreta, seguro que nadie se asustará si lo encuentra por un cajón. También es perfecto para parejas que buscan algo pequeño, para probar.
¿Quieres hacerte con tu macaron? Elige tu color favorito y pásate por AQUÍ.
¡Por cierto, mis croquetas! Aprovecho para hacer un anuncio de forma pública: si estás interesada en el mundo de los juguetes eróticos, resérvate el viernes 19 de mayo. Estate atenta a mi Instagram para más info…