Hola, croquetillas. Fiel a la cita semanal, hoy vengo a recomendaros uno de los animes nuevos que más me ha gustado.
Si yo os digo: “¡Chu Chu yeah!” ¿Qué respondéis vosotras? Exacto, “Please me!” (sí, me contesto yo sola, ¿pasa algo?). Se trata de “Kobayashi-san chi no Maid Dragon”, traducido por “La Doncella Dragón de Kobayashi-san”. De nuevo contaré de qué va esto basándome en mi experiencia personal con la serie. Este anime es de enero del 2017, son 13 episodios más unos extras exclusivos de los BDs (una historia corta por cada disco y un capítulo especial que remata la historia).
Yo empecé a verla porque me hacía gracia, es un “slice of life” (historia que narra el día a día, lo cotidiano) que parece simple pero realmente es bastante compleja y cuenta cosas muy interesantes. Tiene valores positivos a tener en cuenta.
La historia empieza de forma muy absurda, la verdad. Kobayashi es una informática asocial, vive sola en un piso pequeño (que a ella le basta y le sobra). Un día, al despertar tras una resaca de campeonato, llaman a la puerta y se encuentra a una dragona gigante que le da las gracias y añade que acepta su propuesta de vivir juntas. Claro, Kobayashi piensa muchas cosas, lo primero, que menuda resaca y a saber qué leches pasó la noche anterior.
Imagina ver esto tras una noche de borrachera
Tohru, la dragona, terminará quedándose a vivir con Kobayashi. Un detalle a tener en cuenta, Tohru sí está enamorada de Kobayashi, no sabemos muy bien por qué hasta que avanza la serie, pero la informática le hace tilín. Kobayashi no corresponde como a Tohru le gustaría, pero tampoco la rechaza totalmente, es más, admite el vivir juntas.
Punto uno, muy importante. Tenemos a dos mujeres jóvenes pero adultas viviendo bajo el mismo techo. No solo eso, hay que ver el detalle, normalmente los shoujo-ai son en un instituto, al menos adolescentes si es otro escenario, y esas relaciones duran lo que dura el instituto, no hay seguridad de que duren más allá. Esto no, son adultas independientes conviviendo bajo el mismo techo y aprendiendo a relacionarse.
Punto dos, también importante. Para mí es la serie más realista que he visto hasta la fecha. Pero, Nanaho, si hay dragones. ¿Y? Me refiero, esto no va de dragones, trata de relaciones personales de todos los personajes que aparecen. Lo de los dragones es metáfora. Por muchas diferencias que puedan separarnos, siempre hay un medio de diálogo y convivencia. De esto va la serie, de cómo aprenden a conocerse y a tratarse seres que ni tienen misma lógica ni costumbres ni nada. Es más, los dragones en su mundo no es que se llevaran muy bien con los humanos.
Tras estas aclaraciones, seguimos con la trama. Al poco llegará Kanna, dragona amiga de Tohru, una niña. Se quedará a vivir con su amiga y la informática ya no tan asocial. Aquí pasan dos cosas muy llamativas. Primera, tenemos a la pareja de mujeres criando a una niña pequeña. Con total naturalidad. Recalco, quizás no sean una pareja típica, pero es una relación que irá evolucionando según aprenden a tratarse. Segunda, como la casa de Kobayashi no sirve por tamaño, se mudan. Kobayashi cambiará su modo de vida para convivir con la familia que acaba de conseguir.
Más cosas, sobre los dragones. Tohru y Kanna no son las únicas. Tohru tiene más amigos y enemigos. Los dragones no son de este mundo, Tohru llega huyendo de algo, que se irá explicando poco a poco. Los otros dos amigos son Fafnir, un dragón negro maldito que odia y desprecia a los humanos… Pero terminará viviendo con Takiya, el único amigo humano de Kobayashi. También aparecerá Lucoa, que vivirá con otros humanos. Aparte, se unirán a la pandilla dos humanos más, una niña de la clase de Kanna y el niño humano con el que vivirá Lucoa. Por último, aparecerá Elma, dragona del orden que llega para vigilar a los dragones descarriados y de paso se queda en la empresa de Kobayashi como informática novata.
Quiero insistir, aún con dragones en la trama es muy realista. En cada episodio se verá madurar a los personajes, cómo evolucionan sus relaciones, cómo muestran la convivencia que tienen todos. Porque los prejuicios están ahí, es una forma de plasmar el racismo y similares. Tras ver este anime yo creo te que cambia el punto de vista. Porque entre bromas y tonterías varias vas viendo que todos esos muros que puedes crear cuando te enfrentas a alguien diferente a ti, pueden derribarse si tratas con esa persona. Y que las diferencias realmente no son nada, o que si hay diferencias puedes sacarle provecho. El ver la evolución y normalización de la relación de Tohru y Kobayashi (y cómo acaba todo en el episodio extra). O la relación de Takiya con Fafnir, otro tipo de pareja. Merece mucho la pena emplear el tiempo en verlo.
Si queréis reíros y ver una gran serie con buena trama, este es vuestro anime, para mi gusto, el mejor del año pasado.
¡Gokigenyou!
Nanaho.