Cougar Town es la típica serie “happy place“, aquella que ves con una copa de vino, que sabes que va a ser divertida, nada trascendental, y te va a hacer pasar un buen rato sin más pretensiones. Por eso, cuando supimos que dos de las protagonistas iban a tener un episodio con una trama “lésbica” esta temporada, ya supusimos que iba a ser igual que la serie: simpática, ligera y que nos haría sacar una sonrisa.
Esta trama de equívoco se produce cuando Ellie da con el colegio perfecto para los niños, pero la inspectora le dice que solamente tienen plazas para casos especiales o familias alternativas. Y ahí, en una muestra de verdadera amistad, Laurie finge ser su pareja y la besa, para asombro de todos, incluído nuestro.
A partir de ahí la trama continúa, dándonos, de verdad, unos momentos de risa incontrolable. Las dos chicas van juntas a un picnic del colegio, para padres de alumnos de nuevo ingreso, y deciden “romper” en directo, con frases tan gloriosas como “He intentado ser la mejor lesbiana posible“. Realmente se agradecen estos puntos blancos en que la homosexualidad no se presenta como algo negativo o difícil, sino como algo que está ahí, y de lo que, por qué no, se pueden sacar situaciones cómicas. ¡Bien por Cougar Town!