Hace eones que dejé de intentar entender Pretty Little Liars. De verdad. La serie con los twists de guión más locos de la parrilla televisiva, y la que abre más interrogantes por episodio, terminó hace poco más de dos meses dejando en el aire cuestiones realmente importantes como quién disparó a Ezra, y la capital de la serie, ¿quién es A? De verdad, ya vale, quiero saber quién es A y por qué tanto odio hacia estas chicas, tantísimo odio que lo ha llevado a elaborar el plan de bullying más enrevesado que hemos visto jamás. Porque lo que en otras ficciones solucionan con, qué se yo, un cubo de sangre encima de la cabeza el día del baile, aquí es un plan que ya dura cinco años, con cuarteles secretos en habitaciones de hoteles, y con prácticamente todo el pueblo implicado. Yo si fuera ellas me mudaba, pero parece ser que no han caído.
En poco más de un mes tenemos a las chicas de Rosewood de vuelta, y la verdad es que el primer avance de la temporada tiene buenísima pinta:
http://www.youtube.com/watch?v=uWxKH0kWv2M