Por qué no tendré novia, si soy un amor y prácticamente un clon algo menos moreno de Beyoncé.
Y es entonces cuando oigo a mis amigas decirme de fondo “porque no sabes ligar …y ¿Beyoncé? ¿De verdad?…” VALE, se me da un poco mal, no reconocería un flirteo ni aunque todos los aviones del ejército se paseasen con carteles por el cielo indicándome el momento justo. Y como en la vida real no los veo, mis referencias quedan limitadas a las bochornosas y poco sutiles frases de la televisión, las cuales no soy capaz de usar (lo que no quiere decir que la lista que viene a continuación no vaya a dar un poco de vergüencita ajena – como debe de ser).
Básicamente la lista trata de frases o tipos de cosas que a mi se me ocurrirían usar, y por lo que, en caso de no querer hacer el ridículo, deberíais evitar. Si ya se os había pasado por la cabeza alguna de estas frases, por favor, consultad con un especialista.
1.Soy una freak y estoy orgullosa. ¡Claro que sí! Pero no todo el mundo comparte esa emoción, ni sigue tus mismas cosas freaks, así que si te miran como a una loca rueda todo lo rápido que puedas. Por lo de ser croqueta. No te me pongas a rodar por el suelo en ese momento, por favor, quiérete. En todo caso, si vas a hacerlo, usa series/películas/frases reconocibles, sigue siendo triste pero al menos sabrá que no estás completamente ida.
(Iba a poner ejemplos, pero al leerlos he sufrido una embolia y no es algo que quiera compartir con vosotras. Para mi sois lo primero.)
2. Entusiasmo científico: Cuando la ciencia es parte de tu vida, a veces no puedes evitar expresarte a través de ella (que le voy a hacer, soy un poco nerd). Si alguna vez te pasa y tienes suerte, la chica no entenderá una palabra de lo que le digas y podrás aprovechar la confusión para cambiar sutilmente (no) de tema. Si no, mas te vale que el humor y el alcohol sean dos factores de peso en el momento. Ejemplos:
- Quiero ser tu fagocito.
- *le ofreces un papel con la palabra ‘electrón’ escrita en él* Quiero enlazarme contigo. *wink*
Amigas de ciencias, somos unas incomprendidas, puede que guardar estas habilidades en un primer momento sea la mejor opción.
Toast, insinuándose
3. Me pongo seria:
- Estudias o trabajas. Yo rezo porque no quede nadie en este planeta al que se le ocurra entrar a otro ser humano con esta capacidad creativa. No hay posibilidad alguna de que liguéis usando esto, porque ya es hasta cruel, la cosa está muy chunga y reirse de las desgracias ajenas está muy feo. Ni siquiera yo lo haría, así que, por favor, #STOP.
- Echarle el cubata encima. ¿Quién fue el lumbreras al que se le ocurrió que manchar ropa ajena era una buena manera de pillar cacho? Es la manera más fácil de que alguien te grite o te agreda, y con razón, así que yo digo NO. Además, puede que en otros puntos de la geografía española (o en otros países hispanohablantes) haga calorcito las noches de fiesta. Pues bien, en el norte no. Hace frío casi hasta en agosto, así que cero bromas con los resfriados tontos. *se recoge la rebequita y os limpia la mejilla con el dedo gordo*
4. Gay-test. Irónicamente cuando más confianza sientes es cuando todo te sale peor. Te acercas a una chica pensando que si vas a hacerlo, más vale hacerlo bien, o al menos no perder el tiempo, así que llegas allí y le sueltas un montón de preguntas. Así, sin anastasia*. Puedes ir desde el sutil “¿qué piensas de la sexualidad de Kristen Stewart?” hasta el directo “soy gay. ¿tú eres gay?“, pasando por preguntas que te ayuden a descartar o confirmar que esta chica te interesa: “¿Fumas?”, “aquí ordena tus 10 series favoritas, obviamente separando comedias y dramas”, “¿Qué opinión tienes de los pandas rojos?” “Del 1 al 10, ¿cuánto dirías que te gusta mirar a la gente mientras se lava los dientes?” (no me juzguéis, la curiosidad crece con la cantidad de alcohol y confianza en vena), etc. etc. Las opciones son infinitas!
Ni que decir tengo que la respuesta más común que te van a dar es el silencio, junto con miradas de pena, enfado y desaprobación. Al menos lo has intentado! Deja que te dé un abrazo.
5. Bailar. No, en serio, si no ligar es lo que voy a conseguir, la manera más rápida de conseguirlo es bailando, o simplemente intentando moverme al ritmo de la música. Si, como yo, al moveros os parecéis más a un Magicarp en pleno ataque de salpicadura que a un ser humano medianamente racional, la opción menos dolorosa para todo el mundo es PARAR. Tras decir esto: I know that feel, bro.
6. Cantar. Y aquí es donde hago hincapié en mi misma. No se puede ir por la vida como si esto fuese Glee, porque ya hemos visto cómo le ha terminado yendo a Glee y no queremos seguir su camino, sobre todo si tu actuación final consiste en el epiquísimo opening de Digimón y nadie va a acompañarte en el camino a la tumba de tu dignidad. Aunque podría ser peor, podrías acabar cantándole Alex Ubago a una chica mientras todo el bar te mira y tus amigos huyen por la puerta de atrás… ¿no?
7. Una imagen vale más que mil palabras.
Esta si que es la teoría del todo, y no la de Stephen Hawking.
Hago lo que la mayoría de las lesbianas. Mirar a chicas necesitada y rezar para que otra persona dé el primer paso.
Y este, amigas mías, es el problema número uno.
¿Alguna vez habéis entrado a una chica de una manera un tanto cómica? ¿Cómo os fue? ¿Habéis usado alguno de los puntos de este post?