Estamos prácticamente en junio, la mitad del año, y con el Festival de Cannes ya finalizado, es el momento de hacer apuestas y más apuestas sobre cómo irá el reparto de premios en la Ceremonia más glamourosa del mundo del cine, los Oscar. Este año podría producirse un hecho absolutamente maravilloso en las nominaciones, y es que podría pasar que la mayoría de las nominaciones en las categorías de Mejor Actriz Protagonista y Mejor Actriz Secundaria sean para actrices que interpretan papeles lésbicos, hecho absolutamente inédito en la historia de estos premios.
Carol, la película de Todd Haynes, está más que cantado que estará cuajada de nominaciones. Las críticas que ha recibido así lo preconizan. Sus protagonistas, Cate Blanchett y Rooney Mara, tienen diversas posibilidades. Podría pasar que ambas estuvieran nominadas a Mejor Actriz Protagonista, ambas a Mejor Actriz de Reparto, o cada una en una categoría. Con Mara habiéndose alzado con la Palma de Oro, sería extraño que en los Oscar compitiera en Reparto, y dado el peso de Blanchett en la cinta, apostamos por su nominación como Protagonista. Pero la decisión está en manos de la productora, que no sabemos cómo jugará sus cartas, y quizá quiera separar a las actrices para asegurarse la victoria en dos categorías. Puestas a soñar, nos gustaría ver a Sarah Paulson nominada también, aunque 1. sería seguro en Reparto, y 2. Está muy difícil la cosa.
La segunda película que tiene infinidad de papeletas para llevarse nominación, e incluso premio, es Freeheld. El drama protagonizado por Julianne Moore, la última ganadora de la estatuillla, y Ellen Page se estrena en octubre en Estados Unidos, y tiene todos los ingredientes para arrasar en las nominaciones: Historia dramática sobre la lucha por los derechos LGBT, dos actrices de peso, y papeles estéticamente nada vistosos, que parece ser requisito casi imprescindible para ganar el Oscar. Aunque nos encantaría que Ellen y Julianne estuviesen ambas nominadas en Actriz Protagonista, aquí está bastante más difícil la cosa, y apostamos por Ellen en Reparto y Julianne en Protagonista. Veremos a ver la productora qué decide.
Y por último, pero no por ello menos importante, una película que se estrenó en Sundance con muy buena aceptación de la crítica: Grandma, protagonizada por Lily Tomlin. El film, sobre una poeta que rompe con su novia e inicia un doble viaje, físico y emocional, con su nieta, se estrena en agosto en Estados Unidos, y suena con fuerza para las nominaciones a los Oscar. Si Lily (o Ellen Page) resultan nominadas, sería la segunda vez en toda la historia de los premios que una persona LGBT es nominada por su interpretación de un personaje LGBT.
Desde que en 1929 se celebrara la primera ceremonia de los Oscar, pocos han sido las actrices que han visto sus papeles lésbicos recompensados con un premio. Recientemente, Charlize Theron por su papel en Monster, y Nicole Kidman por Virginia Woolf en Las horas. Annette Benning estuvo nominada por The kids are allright, y Judi Dench por Notes of a Scandal, pero habría que escarbar en el subtexto para encontrar alguna más. Ojala en 2016 se cumplan nuestras previsiones.