La salida del armario pública de Ellen DeGeneres tuvo una importancia enorme. Eran los 90, esa década en que nadie decía famoso que era gay o lesbiana. Nadie lo había hecho público nunca, excepto honrosas excepciones. Y, de repente, Ellen DeGeneres dio un paso al frente y se convirtió en la primera mujer del star system en decir que era lesbiana, haciendo, de paso, que su personaje en su sitcom también lo anunciara. Eso le costó un juicio público que visto ahora nos da vergüenza ajena, y dejar de trabajar durante unos cuantos años porque nadie la llamaba. Nadie. Cero personas. Sabemos cómo acaba la historia y tiene un final feliz, con Ellen como una de las presentadoras y empresarias más reconocidas ya no de Estados Unidos sino del mundo, una triunfadora en todos los aspectos de la vida, y una persona extraordinariamente preocupada por causas sociales. Pero, ¿y antes de todo esto?
Estos días ha salido a la palestra un video de Ellen pre-salida del armario en una alfombra roja, acompañada de Johnathon Schaech, con quien se coge de la mano. El actor, con motivo de su aparición en Legends of tomorrow, hizo un hilo en Reddit, en donde habló de su experiencia como tapadera de la orientación sexual de Ellen.
Mi manager me preguntó si la podía acompañar a eventos. Ella estaba muy asustada de que la gente no viera su sitcom porque ella era lesbiana
El actor contó que él estaba encantado porque tiene un tío gay y dos tías lesbianas, de las que contó una emotiva historia.
Mi tía murió de cáncer. Ella era una mujer orgullosa, y no tuvo los cuidados apropiados porque no quería estar lejos de su pareja. Cuando tienes a alguien en tu vida al que quieres y que es gay o lesbiana está muy claro que se merece los mismos derechos que cualquiera
Como anécdota, el actor tenía una pequeña aparición en el episodio de Ellen en que su personaje salía del armario, pero el día anterior había corrido una maratón y, literalmente, no se podía mover. Sirva todo esto como recordatorio de que no siempre fueron tiempos fáciles para la comunidad LGBT, y de que la lucha debe seguir.
Vía: Huff