Dice Ruby Rose en su entrevista para el nuevo número de la revista Galore que ella no es para nada una party girl, que a ella lo que le va un viernes noche es quedarse en casa viendo cosas en Netflix. Obviamente somos almas gemelas. La australiana cuenta muchas cosas, entre ellas quién es su crush:
Me cuesta elegir entre Madonna y Angelina Jolie. Angelina en Inocencia interrumpida entonces, y ahora, y para siempre. Y Madonna también, pero especialmente cuando hizo Erotica y en la era del Sex book. Ella era un icono feminista y del empoderamiento, y el modo en que se ha reinventado a través de toda su carrera ha sido hipnótico para mi. Oh, y Jennifer Lawrence, como a todas.
En Galore le preguntan también que qué le parece eso que se ha puesto tan de moda ahora, el decir “Ruby Rose me ha vuelto lesbiana”.
Me río, porque no es una posibilidad de verdad. Suena como si hiciera algo contra ellas enmedio de la noche, como si hurgara en su cerebro y apretara el boton gay y me fuera con una risa maligna y dejara que se las apañaran, recién gays en este mundo (…) La gente le dice a JLaw “quiero ser tu mejor amiga”, o a Taylor “quiero estar en tu banda”. Cada cual tiene sus cosas, y la frase que se me quedó después de OITNB es “ella me hizo gay”. Lo que me hace gracia es que ahora estoy soltera y no busco nada. Estoy centrada en mi carrera.
Podéis leer el resto de la entrevista aquí. Pero lo mejor, lo mejor, lo absolutamente mejor del reportaje, es que viene acompañado de unas fotos que ARF. No, en serio. Arf.