En palabras del actual Premio Nobel de literatura, times are a changin. Y oye, fenomenal. Una de las instituciones más tradicionales que existen es la aristocracia, ya sabéis, el conjunto de personas que ostentan títulos nobiliarios. Su ADN se basa en tradición, tradición, tradición, pero las nuevas generaciones están haciendo un gran trabajo conjugando ese aspecto con, sorpresa, el 2017.
No me quiero poner muy histórica, pero a grandes rasgos os diré que la nobleza es uno de los pilares que han sustentado la historia de Reino Unido. No en vano, hasta hace cuatro días (cuatro días de verdad: 1999), el tener un título nobiliario te daba acceso directo a la cámara de los Lores, uno de los órganos del poder legislativo del país. Casi nada. Ahora, la hija de un Marqués, más concretamente el Marqués de Aberdeen y Temair, ha anunciado su compromiso con otra mujer.
Lady Anna Gordon, que trabaja en la Fundación del Príncipe Carlos para la Caridad, utilizó la tradicional fórmula de anunciarlo en la prensa para contar que se va a casar con su novia, Sarah McChesney. También, claro, lo colgó en sus redes sociales, con un escueto “Vaya fin de semana. Le pedí al amor de mi vida que se casara conmigo y me dijo que sí. Fiu.”
El padre de Lady Anna es el septimo marqués de Aberdeen y Temair. Este título fue concedido por la Reina Victoria a su (dejadme contar) bisabuelo, que fue Gobernador General de Canadá, y al parecer lo hizo tan bien que la Reina hizo un upgrade del título, ya que anteriormente era Conde. Lady Anna, al ser mujer, no tiene derecho a heredar el título de su padre, pero who cares.
Vía: Pink News