Seguro que conoces a Reneé Rapp, la protagonista de la serie de HBO de Mindy Kaling The Sex Lives of College Girls, que es bastante guay y si no has visto, te recomendamos. Tras la serie, lanzó su álbum “Snow Angel”, con gira estadounidense y europa, pero en agosto vino una gran bomba: abandonaba el show que le dio fama, y además lo hacía porque no estaba a gusto.
Durante el período en el que filmó la serie, estuvo en sets donde estaba “dispuesta a tragar mierda y dejar que las cosas hirieran mis sentimientos” y que sus colegas cuestionaron su sexualidad porque estaba saliendo con un hombre. Rapp, abiertamente bisexual desde el comienzo de su carrera, estaba claramente frustrada por la situación, algo que no es para menos. “Alguien preguntó: ‘Bueno, sólo eres gay por aquí, ¿verdad? ¿No eres realmente gay en la vida real?’”, dijo. “Les dije que era bisexual y me dijeron: “Pero tienes novio”.
La actriz, que estrena este viernes la versión musical en la gran pantalla (sí, es como suena) de Chicas malas interpretando a una versión queer de Regina George se muestra feliz en una entrevista con Vanity Fair acerca de trabajar con personas que no la cuestionan.
Las personas en mi vida con las que trabajo ahora se preocupan por mí como persona, y creo que esa es una diferencia con las cosas que he experimentado en el pasado
Con respecto a su papel de Regina, tiene claro que Rachel McAdams es su inspiración, pero que ella está ahora en su piel: “Coqueteo con todo el mundo. Entonces voy a estar en plan ligón, especialmente con las chicas, ¿verdad? Tengo una actitud de perra, así que voy a ser una perra. Y yo también soy muy seca, así que ella también lo será”