Un amor de verano llega por fin a las salas españolas coincidiendo con la semana del Orgullo y, su directora, Catherine Corsini, se ha dado un garbeo por nuestro país para promocionarla.
Protagonizada por Cécile de France y Izïa Higelin, transcurre en la Francia del 71 y, en ella, se entremezclan una historia de amor, feminismo y el contraste entre el París más liberal, y el campo, siempre más conservador. Es “un mundo que parece abierto” pero no lo es, donde “parece que nada ha cambiado. Ni siquiera a día de hoy, “ser homosexual es (…) lamentablemente, igual de difícil que antes”.
El feminismo y la emancipación femenina es una parte muy importante de la historia que tiene lugar en plena revolución feminista de los 70, “que consiguió apartar al orden patriarcal y la dominación masculina”. La situación actual es menos postiva, opina Corsini, “45 años después, hay una regresión y es inadmisible. Las propias mujeres dicen que no son feministas. Las mujeres deben hacerse de nuevo con los ideales feministas y conseguir que sigan adelante”.
La idea de la cinta comenzó a fraguarse tras la manifestación contra el matrimonio homosexual que tuvo lugar en París, en el 2013, que concentró a 300.000 personas. Ella y la productora Elisabeth Perez, quien es también su pareja, querían una película “militante y comprometida, que mostrase las dificultades que entraña ser homosexual” y que reflejase el “camino tortuoso y complicado” que fue para Corsini vivir su homosexualidad.
La comparación entre Un amor de verano y La vida de Adèle es inevitable. De la película de Abdellatif Kechiche no habían oído hablar hasta su estreno en Cannes, cuando ya llevaban seis meses trabajando en el guión, lo que les llevó a plantearse si continuar o no por miedo a fuesen muy parecidas. Pero, tras haberla visto, se dieron cuenta de que lo que querían contar era muy diferente entre sí y continuaron adelante. Para Corsini La vida de Adèle es “una película fuerte pero las escenas de amor…” . Bromea diciendo que le dijo a Elisabeth “Vamos a probar las mismas posiciones que en las escenas de sexo (…). Y lo intentamos. Y casi me parto la espalda.”
Podéis leer nuestra reseña de la película aquí.
Vía: El confidencial / El confiencial