Desde que en 2017 publicara Piruetas, La Cúpula nos regala periódicamente con las obras más personales de Tillie Walden. Gracias a ella, hemos podido disfrutar de En un rayo de sol, ¿Me estás escuchando? o El último verano, por lo que era una cuestión de tiempo que Sola en el espacio aterrizara en nuestro país.
En este caso no nos espera una nueva historia completa, sino una recopilación de las historias tempranas de Walden. Sí, tempranas, porque, aunque la autora texana apenas cuenta 26 años sobre este cascado planeta, su trayectoria en el mundo del cómic ha sido fulgurante. Ya adelanto que merece la pena asistir a su evolución como artista y apreciar la incorporación gradual de grandes marcas del estilo de Tillie como el uso del bitono, la importancia de la arquitectura o ese realismo mágico que supuran muchas de sus obras.
Las historias de Sola en el espacio recopilan el trabajo de Walden entre los 17 y los 20 años. E incluso en las más antiguas ya están recogidas muchas de sus inquietudes como autora, las relaciones interpersonales y el romance entre mujeres (Me encanta esta parte), el bullying (Fogonazo), la búsqueda del yo y la entrada en la madurez (Una ciudad interior, En la palma de tu mano), el onirismo desatado (Soñado)… Es un deleite ver cómo según pasan los meses, Walden maneja cada vez mejor las transiciones y el ritmo (Sol en los ojos). Pero, sobre todo, cómo domina el arte de plasmar la arquitectura interior de la soledad. En esta era inicial, las mujeres de Tillie, aunque aparezcan acompañadas, me transmiten soledad. Una soledad que se escapa de ellas y cae al exterior en forma de edificios enormes o paisajes avistados en sueños. Cómoda en algunos casos, dolorosa en otros.
En resumen, una obra imprescindible para completar tu estantería de Tillie Walden. O una opción para acercarte al melancólico universo de esta historietista.
Gracias como siempre a La Cúpula por su ejemplar de prensa para la realización de esta reseña. Puedes comprar Sola en el espacio en la web de la editorial, en tu tienda de cómics de confianza o acercarte a una biblioteca, que está la cosa muy malita =)