Como somos, al contrario que algunos directivos de ciertas compañías, mujeres del siglo XXI, entre nuestras múltiples redes sociales se encontraba un canal de YouTube. Digo se encontraba porque esta mañana la empresa nos ha enviado un mail para avisarnos de que nos lo cerraba de manera fulminante por lo siguiente.
No está permitido en YouTube el contenido que muestre relaciones sexuales explícitas y cuyo objetivo sea proporcionar placer sexual. Revisamos el contenido educativo, documental, artístico y científico caso por caso. Solo hacemos excepciones si el contenido tiene un contexto suficiente y adecuado, y si su publicación está justificada.
Tú, croqueta que quizá no ha entrado jamás en nuestro canal porque tampoco teníamos tanta cosa, te preguntarás si no estaríamos subiendo, no sé, los grandes éxitos del porno lésbico contemporáneo. Pero la realidad es que lo más *hot* que teníamos era el bailecillo que Carmen de la Pica Morales le hacía a Shane. Sí, ese que se quedaba en braga y sujetador, que vale que es un poco ‘Uf, Samur’, pero tampoco es aquí un descoque.
Total, que hemos pensado en nuevas propuestas para un futuro canal de YouTube que dure, no sé, mil años por lo menos. Como el contenido no puede tener ninguna de las palabras prohibidas por la compañía, es decir, cualquiera que haga que al Foro de la familia se le levante un pelo de una ceja, las descripciones van a tener que ser también acordes a la política de YouTube. No sabemos si nos va a salir bien, pero lo vamos a intentar.