Los caminos de los homófobos son sibilinos y sutiles. Normalmente un homófobo no te dirá que está en contra de los gays, te dirá que está a favor de la familia tradicional. No te dirá que odia a las lesbianas, preferirá contarte la milonga de que esas cosas son privadas. Que vale que nos casemos, pero que no lo llamemos matrimonio. Los legisladores, por mucho que sean cargos políticos, en ocasiones también son homófobos, y tienen ideas homófobas, y quieren sacar adelante proyectos de ley completamente discriminatorios. Pero, eh, ellos lo llaman Ley de libertad religiosa. Es lo que está ocurriendo en Georgia, Estados Unidos.
Nathan Deal, gobernador Republicano de Georgia, tiene hasta el 3 de mayo para refrendar una ley, la HB757, que, disfrazada de apoyo a la libertad religiosa, daría libertad a los empleadores para, por ejemplo, no contratar a alguien esgrimiendo que su orientación sexual va en contra de sus valores religiosos, o denegarle la asistencia sanitaria por los mismos motivos. Todo un ejemplo de rectitud moral. Aunque no es el primer estado que pone en marcha iniciativas de este tipo, el caso de Georgia es especialmente trascendente por un motivo, y es el boicot con el que las grandes empresas han amenazado al Estado si sigue adelante con la ley.
Seguramente habréis oído muchas veces aquello de que el cine español está muy subvencionado, que esas películas las pagamos todos, y todas esas cosas (que, por otra parte, son ciertas). Pues bien, con las películas rodadas en Estados Unidos pasa exactamente lo mismo: los rodajes de series y películas están subvencionados por los Estados, sólo que a través de deducciones fiscales. Rodar en Georgia es, aproximadamente, un 30% más barato que en cualquier otro punto del país, que es la cantidad que el Estado te devuelve en beneficios fiscales. No es tan barato como en Canadá, hogar de cantidad de series como Arrow, Supernatural, Once upon a time, The 100, Fringe, The L word, Battlestar Galactica y un montón de ejemplos más, pero es sustancialmente más económico. ¿Y por qué el Estado paga estas cantidades a las rodajes? Por el dinero que revierte en comercios, alojamientos y, en general, allá donde se rueda.
Y aquí es donde el Gobernador va a tener que elegir entre cabeza y corazón. Disney, un gigante de la producción audiovisual cuyo grupo incluye ABC, Freeform, Marvel Studios, Pixar y Lucasarts, ya ha anunciado que si la proposición pasa adelante, no rodarán ni un segundo más en Georgia, cancelando planes como Guardianes de la Galaxia 2, Capitán América 3, The Walking Dead y, en general, cualquier proyecto que tengan sus filiales entre manos.
Disney y Marvel son compañías inclusivas, y aunque hemos tenido grandes experiencias en Georgia, hemos planeado llevarnos nuestros negocios a otra parte donde no haya legislaciones permitiendo prácticas discriminatorias respaldadas dentro de la ley estatal
Y tras ella, otras compañías han dejado claro que no harán negocios ahí. Es el caso de Intel, cuyo CEO lo anunciaba en Twitter.
We oppose discrimination in all forms. @GovernorDeal do the right thing and Veto House Bill 757. Proud to be an #LGBTQAlly
— Brian Krzanich (@bkrunner) March 17, 2016
Time Warner, que posee HBO, más de lo mismo.
En Time Warner la diversidad en todas formas es el núcleo de nuestro sistema de valores y del éxito de nuestro negocio. Nos oponemos con firmeza al lenguaje discriminatorio y a la intención del proyecto de ley de libertad religiosa de Georgia, que claramente viola los principios y valores de inclusión y la habilidad de la gente de vivir y trabajar libres de discriminación
Starz, 21th Century Fox, Viacom, Lionsgate, Sony… la lista de compañías es casi interminable, así como la de estrellas que han mostrado su rechazo firmando un manifiesto en el que encontramos nombres como el de Kristin Chenoweth, Anne Hathaway, Zoe Kravitz, Marisa Tomei o Julianne Moore. Incluso Coca-Cola, que tiene su sede en Atlanta, rechaza esta proposición. La oposición a la firma es fuerte. Pero lo que puede tener la clave, ser la pieza final de este asunto, es el anuncio de la NFL, la Liga Nacional de Fútbol Americano.
Atlanta, la capital del Estado de Georgia, es la casa de los Falcons, uno de los equipos más notables de la liga. Para 2017 se prevé que estrenen nuevo y flamante estadio, orientado a albergar la Superbowl, evento multimillonario que en su pasada edición dejó un beneficio de 500 millones de dólares al Estado de Arizona. Pero la NFL ya ha anunciado que, si esta proposición discriminatoria se convierte en ley, no se tendrá en cuenta a Georgia para el partido más importante del año.
Quedan unos 40 días para ver qué sucede con esto. Parece que hay veces que hay que tirar del bolsillo para que cuestiones básicas como la igualdad de derechos sean respetadas. Pero, si funciona, sea.