En 1983 se produjo un hito sin precedentes en el bloque capitalista: Una mujer llegaba al espacio. En un mundo dividido, y que el despliegue de poderes se hacía mediante una frenética carrera espacial, Sally Ride poco menos que era una heroína, por más que Terehskova y Savitskaja ya se hubiesen paseado hace tiempo por el espacio. Ahí empezó una carrera de leyenda, en un tiempo en que la NASA parecía una agencia fascinante, antes del desastre del Columbia. Sally se dedicó a acercar la ciencia a los más pequeños, y se llevó los más grandes honores de la nación, hasta su muerte en 2012. Pero lo que nunca, nunca hasta su muerte desveló es que era lesbiana.
Lynn Sherr, comentarista de ABC news especializada en lanzamientos espaciales, y amiguísima de Ride, publica ahora un libro en el que, con el consentimiento de Tam O’Shaughnessy, quien durante 27 años fuese pareja de la astronauta, narra detalladamente su biografia y la lucha interna de esta.
(Después de escribir el libro) Desde luego, la conozco mucho mejor. Las revelaciones sobre su vida personal me hacen sentir mal: ella no sentía que pudiera compartirlo con el público y la gente que realmente se preocupaba por ella. Yo no sería honesta si no dijera que que lo mantuviera en secreto me duele un poquito. Por la misma razón, es su vida y ella vivió de la manera que quiso. El hecho de que ella nunca mencionara a Tam, me duele, no es que me dejara fuera de su vida, sino que no he podido compartir esa faceta con ella. Pero me quedo con lo que me dio porque era una gran amiga y teníamos un montón de grandes momentos juntas
Veintisiete años son muchos para mantener un secreto, y más cuando eres una famosa de primer nivel como los era ella:
Si no hubiese sido por Tam, tan audaz, honesta y real sobre su vida juntas, Sally su hubiese muerto sin decir ni una palabra. No hay ningun indicio que dijera que iba a hablar sobre esto. Pero cuando Tam sacó el tema, Sally le dijo “lo que te parezca bien a ti, está bien para mi”. Creo que eso habla de dos cosas: es un gran tributo hacia Tam por tomar la iniciativa y dice mucho de Sally, por decir “ve a por ello”
En diciembre de 2013, Tam concedió la primera entrevista de su vida. En ella habla de prácticamente todos los temas relevantes: cómo era Sally, su amor por la ciencia y el espacio, sus inquietudes, y, claro, su relación. A la pregunta de cómo era su relación con la astronauta, Tam contestó:
Sally y yo nos divertimos mucho haciendo lo que hicimos durante 27 años juntas, y de hecho incluso antes, porque nos conocíamos desde niñas, así que siempre pasábamos mucho tiempo juntas, y fue una gran sorpresa cuando nos enamoramos a una de la otra
Está claro que la sexualidad de Sally no afecta en nada a su carrera profesional, pero sí le otorga una pátina de en su vida personal que la hace mucho más interesante, y la convierte en un ejemplo para todas.
Vía: Scientific American | Windy City