Evan Rachel Wood ha decidido que no quiere callarse. Sabe que permaneciendo en silencio no conseguirá nada tal y como están las cosas hoy en día, y ha decidido que es el momento de hablar. Permaneciendo en silencio no conseguirá nada tal y como están las cosas en la actualidad. Es por eso que, después de una entrevista con la Rolling Stone dónde habla de su sexualidad y cómo fue violada dos veces, decidió publicar su declaración en Twitter.
“No creo que vivamos en un momento en el que la gente pueda estar callada mucho más tiempo. Yo no puedo. No teniendo en cuenta el estado en el que se encuentra nuestro mundo con su obvia intolerancia y sexismo. (…) Esto es algo de lo que se debería hablar porque solemos meterlo bajo la alfombra como si no fuera nada y no aceptaré que esto es lo ‘normal’. Es un problema muy serio. Sigo de pie. Sigo viva. Soy feliz. Soy fuerte. Pero todavía no estoy bien. (…)
Sí. Me violaron. Por mi pareja mientras estábamos juntos. Y en otra ocasión, por el dueño de un bar. La primera vez no estaba segura de si sí lo había hecho una pareja se consideraba todavía violación, hasta que ya era muy tarde. Además, ¿quién me creería? La segunda vez creí que era mi culpa y que debería haber luchado más por evitarlo, pero tenía miedo. Esto fue hace muchos años y, por supuesto, ninguno fue mi culpa ni ninguno de los dos estuvo bien.”
Además de hablar de las agresiones sexuales sufridas, en la entrevista para Rolling Stone también se abre sobre su sexualidad. Evan Rachel Wood, quien incialmente se etiquetó como bisexual pero ahora se siente más cómoda identificándose como gender-fluid, reconoce que su vulnerabilidad siempre estuvo ligada a su sexualidad, a la vez que lo estuvieron los muchos abusos que sufrió a lo largo de los años, psicológicos, físicos y sexuales. También recuerda todas las veces que tuvo que soportar el típico “no es más que una fase o algo estúpido, algo que haces por llamar la atención” y lo mucho que le costó mantener relaciones sanas como adulta porque todavía existía cierta “vergüenza y estigma alrededor de la sexualidad” que le afectaba en su forma de relacionarse con la gente. Salir del armario públicamente en 2011 la ayudó mucho, pero no fue hasta el nacimiento de su hijo que lo cambió todo y consiguió aceptarse.
Vía: Huffington Post