Con motivo del mes del Orgullo, que en Estados Unidos se celebra de un modo más intenso que, quizá, en el resto del mundo, la selección de fútbol de dicho país anunció que llevaría una camiseta especial, con la numeración decorada con un arcoíris, símbolo universal y por excelencia de lo LGBT. Las jugadoras estaban convocadas para un par de partidos amistosos con las selecciones de Suecia y Noruega, y hasta aquí todo el mundo contento porque ver jugar a Estados Unidos y Suecia es un espectáculo.
Pero resulta que una jugadora, la defensa Jaelene Hinkle, quien juega en el North Carolina Courage, renunció a su plaza en dichos partidos, y Outsports, quien se hace eco de las declaraciones de la jugadora respecto al matrimonio igualitario, se pregunta si la razón ha sido evitar llevar la camiseta.
El día que se aprobó la ley de matrimonio igualitario en Estados Unidos, ella tuiteó “Este mundo se está viniendo abajo y alejando de Dios. Todo lo que podemos hacer los creyentes es rezar”. Es una pena que una jugadora de tanto nivel renuncie a estar en la mejor selección del mundo por una cuestión de convicciones, pero bueno. Poco a poco, a base de educación, a ver si esto cambia.
Vía: Outsports