El capítulo anterior fue tan bonito. Tuvimos todo lo que queríamos/esperábamos y más.
Hasta los dos minutos finales… que no hace falta recordar.
La inquietante promo de este capítulo nos adelanta que: «Someone will rise. Someone will fall. Someone will die.» Muchas dudas y demasiada tensión para resolver en menos de una hora. El capítulo se titula «Seeing Red». En lugar de comentar el título, os dejo lo que Danielle Cormack (Bea) le recomendó a una fan que le preguntó cuál era el kit de supervivencia para el final de temporada.
Your crew.
Hydration.
Anti- freeze.
Band-Aids.
Compass.
Tissues.
Commemorative statuette of Liberty. https://t.co/XZvhBxp1ku— DANIELLE CORMACK (@daniellecormack) July 25, 2016
El kit incluye: tu pandilla, hidratación, anticongelante, tiritas, una brújula, pañuelos y una Estatua de la Libertad conmemorativa. Algunas de estas cosas nos asustan, otras nos desconciertan. A ver si al final del capítulo somos capaces de entender para qué es cada una.
Empezamos con el despertar de Bea tras la que, probablemente, ha sido la mejor noche de su vida, con Allie. Incluso Liz ve la felicidad que irradia.
Bea, superfeliz, va a las duchas porque Allie aún está allí, pero lo que se encuentra no es lo que esperaba.
Ante la situación, por Allie, Bea vuelve a infringir una de las reglas no escritas de la cárcel, que ella misma defendió hace unos capítulos: pulsa el botón del pánico.
De momento, parece que, aunque esté grave a causa de la sobredosis, Allie está viva. Aunque Ferguson se ha encargado de que parezca que Allie se ha drogado, Bea sabe que no ha sido así (se lo prometió) y llega a la conclusión de que ha sido Kaz, para vengarse. Bea está destrozada. Cree que si no hubieran tenido nada, Allie no estaría al borde de la muerte.
Bea se encuentra con Will. Le pide ir al hospital a ver a Allie, aunque sabe que es imposible (aquí Will se da cuenta de que Ballie existe). Además, le insiste en que Allie no se drogó y le pide que revisen las grabaciones de las cámaras. Pero ya lo han hecho y no han encontrado nada. ¡Muerte a Jake! Con estas noticias y después de ver a Kaz hablando con Linda, Bea confirma sus sospechas y le hace una visita a Kaz.
Kaz también está destrozada por lo que ha pasado. Aunque a veces no lo parezca, también quiere a Allie.
Vera visita a Bea en la enfermería, donde tendrá que pasar la noche por una probable conmoción. Bea vuelve a insistir, en este caso a la alcaide, en que alguien drogó a Allie. Vera le dice que está haciendo todo lo que puede, y los médicos, con Allie, también.
No estoy llorando, ¿vale?
Al final del vídeo hemos visto como Ferguson, que se dirige a su juicio, en pocas palabras, ha confesado que fue ella.
Bea sigue en enfermería y pide hablar con Will. Cuando por fin lo consigue, le cuenta sus sospechas sobre Ferguson y le dice que ella puede solucionarlo con una llamada. Al rato, Will le da un teléfono de prepago. ¡Will, te queremos! Bea se pone en contacto con Franky y llegan a la conclusión de que Shayne va a matar Nils Jesper, el testigo principal contra Ferguson. Franky se pone en marcha para evitarlo.
Vamos a sacar algo positivo de esta escena, además de que Franky ha detenido a Shayne: ¡han apuntado a una lesbiana con una pistola y no ha muerto! (Que sabemos que a las balas les gustan mucho las lesbianas.)
Le han dado el alta a Bea. Cuando vuelve a su bloque, Maxine le dice que tiene que ir al hospital más tarde e intentará ver a Allie. Mientras, Bea utiliza el teléfono que le ha dado Will para saber cómo está Allie, pero como no es familiar, no le dicen nada. Entonces, se va a la celda de Allie.
Bea se hace pasar por la hermana de Allie y justo cuando van a darle información sobre su estado, se le acaba el saldo. ¿En serio?
Mientras tanto, alguien se ha encargado de matar a Nils Jesper cuando iba de camino al juzgado. Resulta que Ferguson no acababa de confiar en Shayne y le había encargado a otra persona que lo hiciera…
¡Odio a Jake!
Sin Jesper como testigo principal, el caso contra Ferguson no es válido y tienen que dejarla en libertad. Con estas noticias, Franky visita a Bea. Le da ánimos y le pide que no se rinda con Allie.
Allie nunca se rindió contigo, Bea, así que tú tampoco.
Will las interrumpe porque Bea tiene una llamada desde el hospital. Maxine ha conseguido ver a Allie.
Primero Bea le dice: «Allie, soy yo. Ya puedes despertarte, preciosa. Eres más fuerte que esto. Lo sabes. Deja de hacer el tonto y despiértate, ¿vale? Despierta. ¡Despierta, por favor!»
Y cuando Maxine le informa de que ha desarrollado un síndrome respiratorio agudo y de que los médicos no pueden hacer nada por ella…
«¿Allie? Todo va a ir bien. Vuela. Serás libre. Encuentra a Debbie y cuida de ella. Y espérame. Espérame. Te quiero, preciosa.».
No sé si os habéis fijado, pero en los últimos segundos del vídeo, además de mostrar lo que sea que haya más allá de la tristeza absoluta, Bea transmite algo diferente en su mirada. ¿Para cuándo un Emmy para Danielle?
Ferguson está a punto de ser liberada. Bea va a hablar con Vera. Le dice que está convencida de que fue Ferguson, aunque no tienen ninguna prueba. Bea convence a Vera de que la deje sola con ella. La provocará, hará que confiese el asesinato de Allie (según Bea, como no se va a despertar, es asesinato) y lo grabará con el móvil. Finalmente, Vera accede.
Antes del encuentro, Bea pasa por el comedor, donde acaban de elegir Top Dog a Kaz. Ambas tienen una pequeña conversación en la que Bea le dice sobre Allie «Todo va a ir bien» y, en pocas palabras, le desea suerte en su nuevo «cargo». Por fin, están en paz.
¿A qué viene ese plano en el que Liz, Booms y Doreen cruzan miradas y sonrisas con Bea?
Antes de verse con Ferguson, Bea pasa por su celda, la redecora y se prepara.
¿Dónde va con ese destornillador? ¿Y por qué ha dejado el teléfono? No tiene sentido si va a grabar la confesión de Ferguson (aunque tampoco está claro que tuviera validez jurídica)… Esto no me gusta…
Sueltan a Ferguson. Por fin, Bea se encuentra a solas con ella, fuera de la cárcel. Y esto es lo que pasa en su encuentro, sin teléfono y con un destornillador…
Y esto. (Avisamos de que el vídeo es un poco fuerte.)
Estaba claro que algo iba a pasar, pero… ¿por qué lo has hecho, Bea? Sabemos por qué, pero aún así… ¿POR QUÉ?
Y por si no había bastante, así acaba el capítulo y la temporada:
¿Qué ha pasado? ¿Qué locura es esta? No entiendo nada. Sobre todo, porque han vuelto a usar la comparación de los caballitos de mar. Recordemos lo que le dijo Allie a Bea: «¿Sabías que a los caballitos de mar les gusta nadar en parejas? Enlazan las colas, así no se separan.» Entonces, ¿por qué Bea muere y Allie despierta?
Justo antes de morir perder el conocimiento, Bea ve que las nubes en forma de caballito de mar se unen por las colas. Si se han unido, no pueden perderse. No puede morir una y la otra no. O quizás sí y soy yo que no puedo quiero aceptarlo.
Si ponemos nombre a cada una de las dudas que planteaba la promo… Someone will rise: Allie, porque se ha despertado. Someone will fall: Ferguson, porque ahora sí que hay cargos y pruebas para encerrarla por asesinato. Someone will die: Bea.
Entonces, ¿esta muerte se considera del «Bury Your Gays Trope»? Después de darle muchas vueltas, no lo tengo claro. Bea no era la lesbiana/bisexual de la serie. Era la protagonista principal, la Top Dog. De hecho, Wentworth tiene muchos personajes LGBT y ninguno es simplemente eso. El personaje de Bea ha evolucionado muchísimo durante estas cuatro temporadas, siendo esta última, quizás, la más bonita de ver.
Es cierto que hay factores que hacen que entre en el «Bury Your Gays Trope», como morir justo cuando por fin era feliz, cuando por primera vez en su vida había encontrado el amor de verdad.
Puede que Bea haya muerto para nada, porque Allie ha resultado estar viva al final (y quizás pudiera haber reconocido a Ferguson como la que le agredió) y fue ese sentimiento de perderla lo que la impulsó a hacer lo que hizo, aunque también tuviera otros motivos.
Por otro lado, tenemos que reconocer que su muerte no ha sido la de «la típica lesbiana». No ha sido para que la trama de otro personaje heterosexual avance. Como Danielle dijo en una entrevista (ahora entendemos por qué), al final de la temporada, Bea es la «tragic hero». No ha sido una flecha; no ha sido una bala perdida; no ha sido un accidente. Lo eligió ella. Tuvo una «despedida» a su manera (aunque no de Maxine), y se fue sabiendo que Kaz es la nueva Top Dog y que se encargará de las chicas. Bea se fue en paz, segura de que se iba a reunir con su hija Debbie y con su amor Allie y sabiendo que, gracias a ella, se iba a hacer justicia con Ferguson.
Todo esto no hace que su muerte duela menos, pero quizás ayude un poco a dejarla ir. Por fin, Bea es libre. Bueno, si está realmente muerta, porque todavía tengo alguna esperanza de que esté viva. Ya comentaremos las teorías que circulan por la red…
Hasta entonces y hasta que sepamos qué ha pasado realmente, yo me quedo con esta imagen y con la última frase de Bea: «It’s gonna be okay».