Hace un tiempo te trajimos un videoclip, el que acompañaba a la canción Touch, en el que varias parejas se dedicaban alegremente a besarse y tocarse, con un medio tiempo de fondo musical que le daba un broche precioso al conjunto. La artífice de la canción era Shura, una arista que desde que la escuchamos se convirtió en una de nuestras favoritas por lo sensible y a la par moderno de su trabajo. La artista ha concedido una entrevista a Mancunianmatters con motivo de su actuación en el festival Manchester gig, y ha hablado de su orientación sexual. A una pregunta de por qué ese video para Touch, Shura contestó
Soy lesbiana. Es como me identifico
Simple y conciso. La conversación sigue.
Creo que hay un amplio espectro para todos, y es algo que quería expresar en el video. Hay muchas maneras de amar. No creo que sea un discurso político ahora mismo. Cuando tú tienes muchos amigos gays, no crees que sea algo diferente o que divida, o raro, es solamente tu realidad.
También tuvo unas palabras sobre el video, que lleva casi 24 millones de reproducciones en Youtube, y sobre lo que significa.
Quería hacer un video que, dependiendo de en qué punto de tu vida lo vieras, pudieses ver lo que quisieras de él. Si estás enamorándote de alguien, puedes ver el video y decir «Oh, es su primer beso, qué enamorados están». Si estás teniendo una ruptura horrible puedes estar como «Oh Dios mío, es su último beso y nunca más van a estar juntos»
Quédate con su nombre, porque va a dar mucho que hablar. Sobre todo si sigue haciendo temazos como White Light, su último single.
Vía: Mancunianmatters


Alegría in da house! Después de que el otro día CW lanzara un mini trailer de la tercera temporada de Los 100, por fin podemos ver un nuevo adelanto más largo y, aleluya, con Clarke y Lexa interactuando. Dentro video.













Anatomía de grey está de parón invernal, ese descanso que las series estadounidenses se toman más o menos entre Acción de gracias y el fin de las navidades, fechas en las que la gente tiene reuniones familiares y con amigos, y en las que las televisión quizá no importe mucho. En este descanso una de sus actrices más icónicas, Jessica Capshaw, quien interpreta a Arizona Robbins ha anunciado que está embarazada. ¡Alegría!
La experiencia de Arizona con las gestaciones es mala, muy mala. Perdió al niño que esperaba, y eso le hizo pensar que nunca pasaría por la misma experiencia de nuevo, por miedo a volver a perderlo. Pero la situación actual de la pediatra es otra. Ya no está casada con Callie, ni tiene pareja. Ha sufrido otras experiencias vitales que, quizá, la hayan moldeado de manera que ahora sí sea el momento.
Esta noche se estrena en el argentino Canal 9 una serie llamada a dar voz a todas esas situaciones que, aunque aún pueden chocar a algunos, cada día son más y más frecuentes, gracias, por ejemplo, a la consecución de derechos sociales por determinados sectores de la población que, hasta ahora, habían estado a un lado, entre ellos el LGBT.
Todas las historias son un constante recordatorio de lo perdidos que están, y, de algún modo, su incapacidad para tomar las riendas de su vida por mucho que ellos lo quieran. Maura inicia una relación con su ex mujer, relación condenada a fracasar, como así lo hace. Pero tampoco encaja con sus amigas transgénero. Ni siquiera, como vemos en el Festival, encaja con las mujeres, pese a ser ella misma una. ¿Donde está su sitio?
La misma deriva llevan sus tres hijos. Sarah huye de una boda que no quiere, que nunca quiso, pero es una huída sin una meta a la que llegar. Josh, que por primera vez en su vida había conseguido ser feliz en una relación, ve como todo se derrumba como un castillo de naipes. Y Ali, egoísta crónica, arrasa con todo a su paso en su descubrimiento de una nueva faceta.
No es la única relación lésbica de la serie, ni mucho menos. A los Pfefferman tienden a gustarles las mujeres, aunque a cada uno les gusten de diferentes maneras. A Maura le gustan «Desde la cabeza hasta la vagina», Ali no puede estar con nadie que no haya estado bajo el yugo del patriarcado, y a Sarah le da absolutamente igual el patriarcado, porque está buscando otra cosa. Algo más… duro y fuera de lo ‘normal’, y resulta que suele venir siempre de mujeres.


Con todo el furor del estreno de Star Wars casi se me pasa que Meryl, Helena y Carey estarán en cartelera. Juntas. En la misma película. Sufragistas. Qué flipe.

