Oh, do a little dance, make a little love
Get down tonight, get down tonight ♫♪♫♪♫♪♫♪
Hoy estamos todas contagiadas de fiebre de sábado noche gracias al soplo que nos ha dado Masdark (¡gracias!) y que nos ha apuntado en dirección a Witches of East End, una serie de Lifetime a la que no le habíamos prestado demasiada atención hasta ahora, pero que habrá que hacerlo tras haber visto el episodio 2×5 y la trama croquetilla que nos han regalado, así, a salto de mata, como a nosotras nos gusta.
Con ese título no hace falta ser un lince para imaginarse de qué va el show, pero por si andas despistada te contamos que sigue las vivencias de una familia de brujas que vive en una ciudad de ficción llamada East End. La serie está basada en los libros homónimos de Melissa de la Cruz y sus personajes principales son Joanna Beauchamp (Julia Ormond), sus dos hijas, Freya (Jenna Dewan Tatum) e Ingrid (Rachel Boston), y su hermana Wendy (Mädchen Amick). Te la puedes imaginar como un Embrujadas moderno, si quieres.
Witches of East End está ya en su segunda temporada, ¿y quién nos lo iba a decir? resulta que en el último episodio de esta semana, llamado Boogie Nights, nos revelan que el personaje de Julia Ormond, Joanna, tiene un pasado croquetil con una mujer llamada Alex, a la que hace más de 30 años que no ve.
https://www.youtube.com/watch?v=jy1BMVKkSHM
[SPOILERS] El episodio gira en torno a tres tramas. Por un lado, Freya está intentando descubrir por qué en sus vidas pasadas siempre acaba enamorándose de Sammy sin que las cosas lleguen a fructificar entre ellos. Y para ello está usando una poderosa poción que le hace soñar con el pasado cada vez que la toma. Ingrid está teniendo el mejor sexo de su vida en un bosque, aunque, claro, si lo haces sonámbula supongo que estas cosas no cuentan. ¿Alguien en la sala ha experimentado algo así y le gustaría compartirlo con todas? Y, finalmente, tenemos Joanna y Wendy, que están muy ocupadas intentando dar caza a una mandrágora para impedir que mate a todos los habitantes de la ciudad. Solo hay un problema: nadie sabe cómo matarla. Y Joanna solo conoce a una persona que haya sobrevivido a un encuentro con una mandrágora, pero no sabe si va a querer ayudarlas.
Así es como conocemos a Alex, una poderosa bruja que tiene la mala costumbre de leerle la mano a la gente (¿por qué todos los personajes lésbicos se llaman Alex?). Joanna y Wendy se reúnen con ella para pedirle ayuda. Alex al principio se muestra un poco reticente (esta es una forma elegante de decir que inicialmente las manda a la mierda), pero acaba plantándose en casa de Joanna para ayudar a dar caza a la mandrágora. Allí asistimos a la interesante conversación que mantienen Wendy y Alex en la cocina:
Wendy: Nunca entendí por qué mi hermana y tú os dejasteis de hablar.
Alex: ¿No te lo contó? Muy propio de ella.
Si aquí no te ha saltado el gaydar, Houston, tenemos un problema.
Gracias a los viajes en el tiempo que está haciendo Freya descubrimos, entonces, qué es exactamente lo que separó a las dos mujeres. Y es que Alex cometió el error de leerle la mano a la hija de Joanna, diciéndole cosas que no quería oír, y esto acabó desatando el “kroken”.
Yo no sé hasta qué punto leerle la mano a alguien puede ser un motivo de ruptura con tu amante, pero como no soy la guionista de Witches of East End intentaré no quejarme demasiado. Eso sí, andaos con mucho cuidado de leer los posos de las tazas a vuestras novias, no vaya a ser que eso os condene a 30 años de estar encabronadas con ellas. Y por supuesto, ni se te ocurra leerle la mano salvo que quieras romper con ella.
De todos modos, ya sabes lo que dicen: donde hubo llamas siempre quedan brasas, así que al final del episodio vemos a Joanna y a Wendy perdidas en el bosque, a la caza de la mandrágora, y asistimos también a su reconciliación, beso incluido.
La escena está un poco oscura, pero siempre puedes usar el poder de tu imaginación…
Curiosamente, lo mejor de este tema no es que le hayan dado un pasado lésbico a uno de los personajes principales de la serie. Lo mejor es que el arco argumental no ha acabado en este episodio, como suele ocurrir con estas apariciones. Todo parece indicar que en el próximo seguiremos viendo a Alex, y ahora que hemos descubierto el pasado de Joanna esperamos que se quede un poco más.