One big happy es una de esas series que, si habéis seguido esta web, os sonará seguro. Producida por Ellen DeGeneres, creada por Liz Feldman, y protagonizada por Elisha Cuthbert, NIck Zano y Kelly Brooks, narra la historia de dos amigos, una chica lesbiana y un chico heterosexual, que deciden tener un hijo juntos. Pero en el proceso, él se casa con el amor de su vida, al que acaba de conocer. Hasta ahí todo bien. Ellen nos prometió que la serie nos haría estallar en carcajadas, y nos la creímos, porque, claro, es Ellen, y es una comediante de primer nivel, y nos fiamos de ella, y todo eso. Además, nos vendieron que era la primera sitcom desde la protagonizada por la propia Ellen que tenía una protagonista lesbiana, y dijimos “estupendo, la compro”. Pero me temo que One big happy es una gran decepción.
Entiendo que la premisa de la serie, de toda la historia, es que Lizzy es lesbiana, y por eso quiere tener un hijo con su amigo. Pero en los primeros dos minutos de serie, antes de que salgan los créditos, nos lo ha hecho saber ya tres veces. Yo lo veo excesivo, aparte de que… estamos en 2015, ¿quién va diciéndole a los dependientes de las tiendas que es lesbiana, como si fuera que es un extraterrestre, o un gran logro? Por si no nos ha quedado claro que es lesbiana, nos lo van a recordar como unas veinte veces más a lo largo del episodio. No vaya a ser que se nos haya olvidado entre escena y escena.
Lizzy, aparte de ser lesbiana, no es muchas más cosas. Como personaje, es bastante plano. En lo que, supongo, es una de las grandes escenas del piloto, el personaje de Kelly Broks aparece completamente desnuda en la cocina. Según Liz Fieldman en una entrevista para The Wrap, esta escena “rompe los estereotipos. Creo que un montón de gente se imaginaría que porque Prudence aparece desnuda en una escena, Lizzy inmediatamente se sentiría atraída por ella, y no es así como funciona”. Vale, ok. Lizzy no se siente atraida por ella, como el 98% de las lesbianas no se sienten atraídas por cualquier mujer desnuda, pero es que lo que hace es aún peor: se dedica a hacer chistes sobre vaginas. “Vagina en la sillas” “Vagina en la pierna”. !? Os juro que he tenido que parar el video de la vergüenza que me estaba dando.
Podría seguir un rato más escribiendo sobre lo mala que me ha parecido, pero creo que ya es suficiente. “La primera sitcom de NBC con una protagonista lesbiana”. Ya. Pues así, de veras que no hacía falta.