Sara, una adolescente quiteña de 17 años poco sociable con sus compañeros de clase, está a punto de terminar el instituto cuando aparece en su vida Andrea, una nueva alumna del centro con la que acabará congeniando por un vicio común: en uno de los recónditos escondrijos del férreo centro, Sara y Andrea compartirán con secretismo cigarros que ayudarán a que, poco a poco, vayan haciéndose amigas. La película ecuatoriana UIO: Sácame a pasear va siguiendo esa exploración de las dos jóvenes interpretadas por María Juliana Rángel (Andrea) y Samanta Caicedo (Sara).
Mientras van estrechando su amistad, se van presentando los contextos familiares de las dos jóvenes: a Sara podríamos considerarla una chica pudiente; su madre lleva las riendas económicas de la familia, y su padre, un escritor, espera a que se publiquen sus textos mientras se hace cargo de la casa. Andrea, por otra parte, no tuvo una adolescencia tan fácil, y se fue de casa a temprana edad para vivir con su tía. La joven empieza a pasar tiempo en casa de su nueva amiga, y empieza a afianzar lazos también con los padres de Sara.
La relación de las dos se precipita con besos furtivos, salidas a conciertos generalistas en los que corren el riesgo de que el resto de sus compañeros de clase pueda descubrir su secreto, y acaban buscando refugio en locales de ambiente LGTB en los que poder besarse y cogerse de la mano en una sociedad en la que todavía no es legal, por ejemplo, el matrimonio igualitario.
UIO: Sácame a pasear, de la directora Micaela Rueda, juega con los silencios –casi más abundantes que los diálogos– hasta el punto de parecer más larga de lo que son sus 70 minutos de duración. Dibuja con mimo la relación de Sara y Andrea y no necesita expresar con palabras los sentimos que las llevan a admitir a través de una carta que mantienen una relación, con un final puede que agridulce, puede que no, abierto a la imaginación del espectador.
La última oportunidad para ver UIO: Sácame a pasear en la 21 edición del LesGaiCineMad es el 1 de noviembre en la Casa de América. La cinta compite en la Sección Oficial del festival madrileño.