The neon demon es una de esas películas con las que no hay término medio. O te genera una reacción extremadamente positiva o negativa. No hay grises. Que la última película de Nicolas Wendign Refn, director de Drive, iba a generar controversia se veía venir y así ha sido. Los críticos han sido implacables con ella y, además, ha sido escogida como la película queer más ofensiva de lo que llevamos de año. Pues bien, yo discrepo.
La escena de la discordia, en la que le ha hecho ganar tal mérito, vemos a Jena Malone, tras ser rechazada por Elle Fanning, haciéndole cositas a un cadáver en la morgue para desahogarse y tratar de olvidar que le han roto el corazón. Fuera de contexto y así contada, a pelo, pues sí que puede resultar bastante ofensiva y de mal gusto, no lo voy a negar, pero la escena forma parte de un todo, que es la película, y si se valora en su conjunto, la cosa cambia.
El depredador y carnívoro mundo de la moda y las agencias de modelos son el centro de The neon demon, que los representa de manera turbia y extrema. Elle Fanning es Jesse, una joven de aspecto inocente y angelical que busca en Los Ángeles hacerse un hueco en él. Despertará la envidia de todas las modelos por su gran belleza y, si quiere, mantenerse, tendrá que aprender pronto las reglas del juego.
The neon demon es una crítica al frívolo mundo de las pasarelas y las sesiones de fotos. Una sátira en la que ellas son meros objetos de deseo, siempre perfectas y vestidas de alta costura, listas para ser admiradas por ellos. Ellos son despiadados, abusivos y se creen con derecho sobre ellas. Todas las que osen apartarse de este modelo patriarcal establecido, por ansiarlas a ellas en vez de ellos, serán castigadas y demonizadas por ello.
Nicolas Wendign Refn nos repite, durante todo el largometraje, que en esta sociedad, la belleza no lo es todo, es lo único. Un bonito envoltorio vale más que cualquier cosa que se pueda encontrar dentro. De manera coherente con su mensaje, en una ejecución técnicamente perfecta y con un tono neo noir, The neon demon resulta visual y musicalmente hipnótica. Un trabajo de terror psicológico, macabro, y de extraordinaria, aunque oscura, belleza, que se mueve entre lo literal y lo metafórico, y que puede no resultar apta para todos los paladares.