¿Qué decir de Black Sails, la nueva serie de piratas de la cadena Starz? Probablemente, nada que no os hayamos dicho ya con palabras o con imágenes. Salvo, si acaso, que el estreno de la serie ha marcado un hito histórico, para la cadena convirtiéndose en el mejor estreno de su historia con 3.5 millones de espectadores.
Si nos basamos solo en audiencia, podemos sacar la conclusión de que Black Sails tiene asegurada una larga y saludable vida en nuestras pantallas. Sangre, violencia, piratas, lesbianas y cañonazos han conquistado al público americano y esto siempre son buenas noticias si consiguen mantener la calidad.
Se cumplen, así, las altas espectativas que los directivos de Starz habían puesto en esta serie. No por nada Black Sails tuvo asegurada una segunda temporada medio año antes del estreno de la primera. Y esto ya es mucho decir. El único antecedente de algo así es Orange is The New Black, cuyos responsables también apostaron por ella antes de saber qué reacción tendría el público. Y las dos tienen personajes lésbicos, así que solo nos queda alegrarnos por los buenos resultados, sentarnos y disfrutar. ¿Qué más se puede pedir? Pues, quizás, que los guionistas no nos maten a las Alex y las Max… el cementerio televisivo está tan lleno de croquetas que los cadáveres amenazan con montar una rave lésbica entre los panteones… Di no a la muerte del personaje lésbico. Gracias.