Uno de los momento más recordados / bonitos / que nos dejaron con la lágrima ahí ahí este año fue la pedida de matrimonio que Martina Navratilova, la celebérrima tenista, le hizo a su novia, Julia Lemigova, en medio de la emisión de un partido del US Open, uno de los eventos deportivos más seguidos en el mundo. “Hemos estado juntas durante seis años y no puedo imaginar mi vida sin ti. Por favor, cásate conmigo.” Y Julia, claro, no pudo resistirse. La pareja contrajo matrimonio este lunes, en Nueva York. Martina dijo sentirse “aterrorizada” por el momento, mientras que su ya mujer definió la experiencia como “abrumadora”, pero en una bonita entrevista para BBC expresó sus sentimientos sobre este momento.
Soy una mujer de 58 años y me he casado por primera vez. Como mujer lesbiana, una no crece pensando nunca en este momento. Pero hace diez años… pensé que igual dentro de diez años el matrimonio gay era legal. Y aquí estamos, diez años después, haciéndolo legal.
La 18 veces ganadora, que se dice pronto, de Grand Slam, quien tiene dos hijas, Victoria y Emma, reveló que era bisexual en 1981, en un momento en que ningún deportista, y mucho menos alguien que estuviese en la cima de su carrera, como era su caso, hacía pública su homosexualidad. Precursora, pues, de la visibilidad en el deporte, lleva retirada de la competición en individuales desde 1994. Desde entonces compagina su labor como asesora deportiva con su asistencia a actos en favor de la comunidad LGBT. Y a partir de ahora, con ver series debajo de la manta con su ya esposa. ¡Muchas felicidades a la pareja!