Tenemos múltiples motivos para adorar a los hermanos Wachowski. El más reciente, su más que alucinante retrato de las relaciones humanas en Sense8, serie de Netflix que, si no has visto ya, te recomendamos más que fervientemente desde esta casa. Otra razón es la archiconocida trilogía de Matrix, serie de películas que ha influído en el cine contemporáneo y en la cultura popular desde el momento mismo de su estreno, en un algo lejano ya 1999. Pero, además, las croquetas les debemos la genial Bound, película lésbica del año 96 que les sirvió para financiar Matrix. Bound nos contaba la historia de Corky, una expresidiaria que inicia una historia de amor secreto con Violet, la novia de un mafioso. La película, con una historia sólida y emocionante, cuenta con una de las mejores escenas de sexo lésbico de la historia del cine. Y no lo digo yo, lo dice Time Out. Esta semana, Gina Gershon, quien interpretó a la mítica Corky, estuvo en The View para hablar de su nueva película, Staten Island Summer, y contó cómo tuvo que deshacerse de sus agentes para poder rodar con los Wachowski.
¿Sabes? Hay una cosa muy divertida con Bound. Recuerdo que me encantó el guión, nadie conocía a estos directores, y yo quería conocerlos porque pensé “este guión es una pasada”. Tan pronto como los conocí, pensé “Estos chicos son estupendos”. podrías decir que eran genios. Pero todo el mundo, y mis agentes, estaban como “No vas a hacer esta película, acabará con tu carrera” Y yo “¿Cómo?” Y ellos “Bueno, haces de lesbiana, arruinará tu carrera”. Es como “¿Y qué? Es un papel genial. Es como el clásico papel que nunca tendré”. Y ellos eran dos directores desconocidos “son muy buenos, estos directores son increibles! Y ellos estaban “No, no, te arruinará, no podemos dejarte hacerlo”. Y dije “bueno, supongo que me voy a tener que ir”. Y dejé a mis agentes. Fue un poco raro, pero en ese momento, ya sabéis, antes de Boys don’t cry y todo eso, definitivamente me encasilló un poco. Después de Showgirls y eso, de repente sólo era una lesbiana asesina loca y en moto, y pensaba “esto es tan bobo”. Pero estoy orgullosa de haber hecho esa película, y muy feliz de haber ayudado a tanta gente. Es increíble. Es una gran película. Me encanta esa película.
Resumen, que Gina se enrolla más que las persianas: Como eran los noventa, esa época en la que Ellen salió del armario y, automáticamente nadie la llamaba para trabajar, sus agentes le dijeron que no le hacía falta correr ese riesgo. No sé hasta qué punto le llovían los papeles, pero ese es otro asunto. El caso es que Gina se enamoró del papel, y aunque eso le costó que automáticamente la gente pensara en ella como la típica butch con moto, está encantada de haberlo hecho. No es para menos, porque es una gran película, más allá de lo LGBT del asunto, y trabajar con directores que merezcan la pena es una satisfacción para cualquier actriz que se precie. Gina, eres una grande.
Vía: Afterellen