Han pasado dos semanas desde el fatídico capítulo de The 100 que tantos fantasmas ha resucitado entre los fans LGTB. Y aunque como os contábamos hace unos días, internet sigue en pleno debate sobre la representación, la maldición de la lesbiana muerta, y las opiniones sobre la trama, la necesidad y las formas de lo ocurrido, pensamos que hemos tenido tiempo de sobra para dar un par de vueltas a la cabeza e intentar encontrar posibles alternativas a lo que pasó en el capítulo. Por ello, os presentamos algunas de las ideas que, en nuestra opinión, habrían sido más entendibles, o, al menos, no tan radicalmente dolorosas como la versión que vimos y que nos hizo sentir que volvíamos a la casilla inicial de un juego al que creíamos haber cogido el ritmo.
A la hora de argumentar sobre las decisiones tomadas a lo largo del capítulo, las dos ideas básicas que se utilizan en relación a la muerte de Lexa son, a) por cuestiones de la trama, la comandante debía morir y así continuar la historia que había comenzado a contar Becca en ese mismo capítulo, y b) la actriz (Alycia Debnam Carey) tenía un compromiso con su nuevo proyecto, Fear the Walking Dead, y no podía seguir interpretando a Lexa, por lo que había que darle una salida. Si tomamos estas dos ideas de manera individual, podemos encontrar algunas alternativas:
Caso a):
- Ontari, la joven de la Nación del Hielo, ataca a Lexa con intención de quitarle el alma del comandante, y en ese acto la hiere, pero no la mata (o como si la mata, habría sido mejor que el sinsentido emitido). Puede que de esta manera obtuviéramos una Lexa que posiblemente no sería respetada, y que tendría que lidiar con el hecho de no ser la comandante para la que se formó desde joven. Bastante más interesante de ver, en mi opinión, si lo comparas con lo que tenemos ahora.
- Como es lógico, Lexa conoce la historia detrás de su cicatriz, y del proceso que se da para ser comandante, y puede que una opción menos invasiva hubiera ayudado a dar información sobre la trama a un nivel incluso mayor. Imaginaos a Clarke preguntando a Lexa por la cicatriz de su nuca, mientras están echadas en la cama, puede que antes -o incluso después- de su segunda ronda de sexy times, y a Lexa contándole a Clarke cómo fue elegida, y cómo le implantaban el alma, mientras la audiencia ve flashbacks de dichos momentos. Todos nos enteramos, y nadie sufre. Llamadme ilusa, me lo merezco.
- Lexa decide declarar la guerra a Skikru, o puede que decida acompañar a Clarke hasta la línea de bloqueo de manera que se acabe dando un enfrentamiento y termine muriendo. En una batalla, con un sentido, con valor y con honor. Puede que salvando a Clarke, o puede que a manos de algún personaje principal que tenga que arrastrar las consecuencias de sus actos frente a esta última. Pero no de una bala perdida, por estar donde no debía cuando no debía.
Caso b). En esta parte hay que añadir que FTWD no había puesto excesivas pegas y estaba dispuesto a dejar a Alycia participar en varios capítulos (puede que la mitad) por temporada en The 100, ya que no parecía haber demasiados problemas de solapamiento en las grabaciones:
- Clarke vuelve con Arkadia para intentar solucionar lo que Pike, con ayuda de Bellamy, un pueblo con pocas luces y la democracia, ha echado a perder. Al no quedar personajes skikru en Polis, la audiencia deja de ver imágenes relacionadas con ese lugar (incluida Lexa), de donde llega la información a cargo de Indra, o incluso Octavia.
- Lexa viaja a la Nación del Hielo para mejorar las relaciones con el nuevo rey y su pueblo, que no había mostrado estar muy conforme con la comandante durante los años de mandato de la reina. Al ser una historia sin mucha trascendencia de cara a próximos capítulos, la audiencia no recibe imágenes de esta parte de la trama.
Caso c): Opción ridícula pero puede que incluso aceptable en esta situación.
Lexa es sustituida por su doble en la serie: Lola la mapache.
Lexa se aleja bailando el Saturday Night hacia el horizonte, porque cualquier alternativa, incluyendo las más tremendamente absurdas, son mejores que matarla, sin querer queriendo, con un disparo al limbo, 70 segundos después de besarse con Clarke.
¿Se te ocurre alguna alternativa más?