Yo soy de aquellas personas que no tienen un libro favorito. Durante lo que llevo de vida he leído tantas cosas y he olvidado tantas otras que, al final, tengo cosas que me gustan, pero ninguna destaca por encima de las demás. Pero Fun Home, sin ser mi libro favorito, sí encuentro que es una obra a la que volver, y que recomendar con tanta fruición como sea posible. La novela gráfica de Alison Bechdel sobre su experiencia personal como lesbiana, y el descubrimiento de la figura de su padre mediante el relato mismo de la historia es una delicia que, a poco que tengas algún sentimiento y no estés hecho de hojalata, te tiene que llegar al corazón. Pero, al parecer, no todos tienen esta percepción de Fun Home, ya que este titulo ha aparecido entre los libros más censurados de Estados Unidos.
La American Library Association’s Office for Intellectual Freedom, o lo que es lo mismo, la Asociación de bibliotecas americanas para la libertad intelectual, ha elaborado un ranking de los libros que más les devuelven desde colegios y otras instituciones educativas, y que reciben más peticiones para, supongo, quemar en una hoguera. Pero no es el único título de temática LGBT que aparece en la lista: I Am Jazz, de Jessica Herthel y Jazz Jennings, Beyond Magenta: Transgender Teens Speak Out, de Susan Kuklin y Two Boys Kissing, de David Levithan son otros tres títulos de contenido o temática LGBT que sufren boicot en ciertas comunidades.
El resto de libros lo son o por divergencia de visiones religiosas (La Biblia, Habibi, Nasreen’s Secret School: A True Story from Afghanistan), por ser Cincuenta Sombras de grey (yo este lo hubiera prohibido, pero por malo), o por razones que escapan a mi conocimiento, como es el caso de El curioso incidente del perro a medianoche, que a mi me parece un tierno retrato de un adolescente con autismo. En todo caso, prohibir libros es algo que, aunque nos parezca anacrónico y caduco y cutre y un poco nazi, sigue ocurriendo. ¿Mi consejo? Que leáis todos los de la lista.
Vía: Pink news