Estamos haciendo historia. Es la primera vez en la historia de los premios Tony, los premios que se otorgan a los musicales más importantes en Estados Unidos, que una producción escrita por una lesbiana y que, oh, cuenta la historia de una lesbiana, obtiene semejante reconocimiento. La industria de los musicales mueve millones de dólares anualmente, y su ceremonia de entrega es una de las más vistas por televisión en cada edición, así que podemos decir que es todo un triunfo, un reconocimiento, un acto que tendrá toda la visibilidad que podamos desear.
Las nominaciones que ha recibido son a Mejor actor protagonista en Musical, Mejor actriz protagonista en Musical, Mejor actriz de soporte en Musical (por partida doble), Mejor musical, Mejor libreto, Mejor música, Mejor diseño escénico, Mejor orquestación, Mejor director y Mejor Iluminación. Es decir, está nominada a todo lo jugoso, y tiene muchas posibilidades de darnos más de una alegría. El siete de junio se celebra la ceremonia, que en esta ocasión estará presentada por Kristin Chenoweth y Alan Cumming, los dos iconos LGBT, cada uno por diferentes razones. Aunque nuestro presentador favorito para los Tony siempre será Neil Patrick Harris.