Nadie puede negar que Satisfyer se ha convertido en todo un éxito. Todo el mundo quiere uno y… la verdad es que esta marca alemana no lo está poniendo muy difícil para que tengas tu Satisfyer en tu mesita de noche.
El primero que probé fue el Pro 2, el que conoce prácticamente cualquiera. Hoy te hablo de un modelo más avanzado, mejorado y que incorpora vibración: Pro 2 Vibration. Oye, mira que me lío con estos nombres…
Una de las primeras mejoras se ve en el diseño. Es mucho menos ortopédico que el anterior, más discreto y más bonito. Al ser más estrecho es más fácil de sostener. Incluso el material es distinto: tiene un acabado más bien mate y un color vino rosado dorado precioso.
Por lo demás es superparecido: tiene una interfaz con tres botones y el cabezal de succión. Parece increíble, pero con esos tres botones puedes crear combinaciones casi infinitas. Para que te hagas una idea, tiene 11 intensidades de succión y 10 modos de vibración. Lo bueno es que puedes usar ambas funciones de forma independiente: solo vibración, solo succión o ambas al mismo tiempo.
El botón de la onda es el que activa la vibración y, para cambiar el modo, tan solo debes pulsar una vez. Para encender y apagar esta función bastará con mantener el botón pulsado un par de segundos. La succión se activa con los dos botones superiores. Lo mismo: con el de arriba presionas dos segundos para encender y ya vas cambiando de intensidad, puedes subir y bajar a tu gusto.
Como hago con todos los succionadores, te recomiendo que lo pruebes en la bañera, porque las sensaciones se intensifican. Como es sumergible no hay problema alguno. Eso sí, recuerda secarlo bien al salir. Todo esto es gracias a su acabado impermeable y el cargador magnético que incorpora. Necesitará 4 horas de carga (atentx al piloto, que se iluminará) para más o menos una hora de placer.
Si no tienes bañera y la ducha se te hace incómoda, otro consejo es que utilices algo de lubricante incluso aunque no te haga mucha falta. Verás que el efecto deslizante es muy agradable junto a las ondas de presión. Además, al poder añadirle la vibración el orgasmo está asegurado.
La potencia es adecuada, porque ofrece una succión desde una intensidad muy bajita hasta la más alta. Eso sí, la función de vibración no me ha impresionado tanto como me hubiera gustado, probablemente porque estoy acostumbrada a juguetes muy potentes. No es tan fuerte y es algo ruidosa, a diferencia de las ondas que sí son más silenciosas. Aun así, que cuente con la vibración, aunque sea más ligera, es un plus para alcanzar el orgasmo.
Con respecto al packaging, Satisfyer Pro 2 viene en su cajita junto al cargador y las instrucciones. Es una presentación simple, pero suficiente. Si deseas transportarlo te hará falta alguna bolsita de tela. Desde aquí me gustaría hacer una propuesta a Satisfyer: ¿veremos packagings sin plástico en el futuro? Seguro que el planeta lo agradece.
Solo me queda hablar del precio: no está mal. Lo veo bien para el juguete que se ofrece, pero en este momento cuesta lo mismo que el modelo siguiente: Pro 3 Vibration, que me pareció más completo y mejorado. Aun así, Pro 2 me resulta más ergonómico y más fácil de sujetar que Pro 3, así que todo depende de con cuál te sientas más cómodx.
En pocas palabras: bonito, funcional y mejorado. Una opción ideal como primer succionador, de una marca que da buenos resultados y cumple las expectativas. Solo te queda elegir cuál se adapta mejor a tus necesidades.
Ahora que yo ya me he mojado comparando modelos… es tu turno de hacerlo con Satisfyer Pro 2 AQUÍ.