No creo que las que visteis el apasionado beso que Tara y Pam se dieron al final de la quinta temporada de True Blood lo hayáis olvidado, y estoy segura que, al igual que Jessica y yo, más de una dio saltitos en su asiento ante la emoción que eso supuso. Y entonces pasó lo que siempre pasa con estas cosas: queremos más. Nos volvemos adictas a que nos den eso que tanto nos gusta y tenemos todo un año para ir creando expectativa tras expectativa sobre lo que pasará entre ellas a partir de ahora, y esas expectativas siempre son geniales porque las crea nuestra mente y ahí no conocemos los límites de la realidad. Así que cuando llegó al verano siguiente tú te sentaste en tu sofá y esperaste ver una nueva temporada de True Blood que te prometía mucho rollo bollo y sangre, tal y como tiene que ser. ¿Y qué es lo que pasó? Yo os lo diré: No pasó nada de nada.
El que avisa no es traidor.
A ver, con Sookie sí, que estoy hasta cansada de verle las tetas, pero entre Tara y Pam no vimos un sólo beso más, de hecho incluso vimos a Pam tratando con bastante desprecio a Tara porque parecía que lo único que le preocupaba era Eric. Que podemos entender todo ese rollo sobre la relación de creador y creado, pero es que Pam es la creadora de Tara, así que también deberían regirse por el mismo patrón. Pero no. Y de nuevo nos sentimos como con The Fosters y esos besos que no nos dieron, y es que parece que siempre nos timen un poco en estas cosas.
Podemos entender que Pam no es una mujer sencilla, que ha sufrido mucho y que está muy unida a Eric porque fue quien la sacó de la miseria que era su vida humana, pero parecía que Tara y su sentido del humor mordaz y cruel podrían llegar a entrar en su corazón y darnos una relación estable lésbica que nos hiciera tirar cohetes, y lo único que vimos entre ellas fueron conversaciones sobre Eric en las cuales Tara dejaba muy claro que no le gustaba que Pam fuera su perrito faldero, y algo de preocupación cuando Tara estuvo a punto de morir por un disparo con balas ultravioletas. Pero ya está. Punto. Y la temporada ha terminado con un final raruno raruno como pocos y con Pam largándose tras Eric y dejando a Tara a cargo de la neófita que Eric creó al inicio de la temporada; Willa, la hija del gobernador y con un “Sois los peores creadores de la historia” y lo cierto es que la pobre tiene más de un motivo para quejarse, porque tras esas palabras Pam no tarda ni un segundo en desaparecer de su vida. No sabemos si será para siempre o algo temporal, pero de momento nos han dejado sin Pam/Tara para largo. Ahora nuestras esperanzas recaen en ciertas imágenes que nos han dejado cosas en las que pensar y en la posibilidad de que, tras el abandono por parte de ambos creadores, Tara haga algo más que sólo cuidar de Willa.
Yo ya las shippeo bastante un poco.
¿Creéis que nos darán un poco de Tara/Willa o volveremos a llegar con unas expectativas que no se verán realizadas?
[ALERTA SPOILER: Si no has visto la final, no sigas leyendo]
¿O quizás la muerte de Eric haga que Pam vuelva en busca de un poco de amor?
[FIN DEL SPOILER]