Si yo fuera Sara Ramírez, no me gustaría estar en sus zapatos ahora mismo. La actriz de Anatomía de Grey tiene sobre sus hombros la inmensa responsabilidad de no partirnos el corazón en la próxima temporada de la serie, que amenaza con romper una de las más queridas, mimadas y adoradas parejas de la comunidad croquetil mundial: Arizona y Callie.
Recapitulemos juntas, que no mata a nadie y así ponemos en contexto a quien no siga tan de cerca a estas dos. Durante el último episodio de la novena temporada de Anatomía de Grey, Callie (Ramírez) descubrió que su pareja Arizona (Jessica Capshaw) le había sido infiel con Lauren (Hilarie Burton). Esto le dolió a ella y nos dolió a todas. El engaño nos dejó un mal sabor de boca terrible, porque sabíamos que resucitaría los fantasmas de Callie, que ya sufrió un desengaño amoroso en el pasado, y porque estamos seguras de que ensanchará la brecha emocional que ya existía entre ellas tras la amputación de la pierna de Arizona.
A decir verdad, la relación entre estos dos personajes de ficción —aunque están muy vivas en nuestros corazones— nunca ha sido fácil. Más bien todo lo contrario. Se trata de una montaña rusa emocional en la que la comunidad LGBT somos las principales accionistas. Vaya, que hemos comprado todos los boletos de aquí a que se acabe el viaje de Arizona y Callie, y somos tan masocas que disfrutamos con cada subida, con cada curva. Pero el problema es que el engaño ha llegado en un momento medio dulce, tras meses y meses en los que hemos visto a Callie armarse de paciencia para lidiar con la desesperante depresión de Arizona. Callie la consoló, la apoyó y estuvo a su lado, todo para salvar su relación, sin pedir demasiado a cambio. Pero justo cuando las cosas parecían estar remontando… ¡zas!… ocurre esto.
Así que ¿ahora qué? ¿En qué situación dejan los cuernos a la pareja? ¿Es este el fin o solo un nuevo comienzo?
Una cosa está clara: Callie no se va a callar. Simplemente, es algo que no encaja con su personalidad, y la actriz que la interpreta también lo piensa así.
“Al principio, veremos a Callie responder de una manera muy evidente y dejará muy claro lo que está sintiendo”, confirmó Ramírez en una entrevista con Hollywood Reporter, cuando le preguntaron sobre el primer episodio de la décima temporada, que retomará la acción inmediatamente donde se quedó en el season finale. “No se lo va a tomar bien; está furiosa, tiene el corazón destrozado, está devastada”.
Bien, eso podíamos preverlo. Unos cuernos no son plato de buen gusto y, además, siempre quedan mal en las fotografías.
Sara Ramírez explica, también, que lo más sangrante de la situación es que los cuernos llegan en un momento en el que todo parecía indicar que la pareja estaba superando el bache que nos ha tenido en vilo durante la novena temporada, lo cual hará que su personaje se sienta todavía peor. “Todo indicaba que su relación estaba mejorando —apunta—; Arizona empezaba a ser más íntima físicamente, así que Callie pensó que las cosas iban bien, y de repente Arizona toma esta decisión de manera unilateral, lo cual ha roto la confianza entre ellas”. En medio de este explosivo cóctel emocional estará, además, Sofía, su hija, cuyo personaje va a tensar todavía más la cuerda en la pareja.
Es difícil prever qué va a suceder cuando la serie regrese el próximo 26 de septiembre, pero, por el momento, ya sabemos que durante el primer episodio de la décima temporada, que durará dos horas, veremos a Arizona haciendo esfuerzos para hablar con Callie del tema. El equipo médico, mientras tanto, estará ocupado intentando atender a todos los pacientes afectados por una gran tormenta.
Llegados a este punto, supongo que lo que todas nos preguntamos es: ¿Hay esperanza para estas dos? ¿Superarán este bache? Arizona y Callie han salido más o menos airosas de situaciones mucho peores, pero un engaño es una prueba de fuego muy dura. Incluso para ellas. “Creo que todo el mundo quiere mantener la esperanza”, comenta Ramírez sobre el incierto futuro de la pareja. “Todos tenemos curiosidad por ver qué va a pasar”.
Según la actriz, hay varios clavos ardiendo a los que podemos agarrarnos. Pero uno de ellos es quizá el más importante, y es que sabemos que a Shonda Rhimes, la creadora de Anatomía de Grey, le encanta reflejar en la serie el mundo en el que vivimos. “No sé lo que va a hacer con Callie y Arizona —explica Ramírez—, o con los otros personajes. Pero la he escuchado hablar sobre lo genial que sería que la serie mostrara el matrimonio igualitario y que ocurriera un matrimonio legal. Eso sería increíble. Muchas cosas están cambiando muy rápido. Vivimos en una época fantástica”.
Ok, así que hay esperanza. O eso parece. O eso esperamos. O si no la hay, siempre podemos lanzarnos a quemar contenedores como protesta social por la ruptura de una de las parejas que ya es un buque insignia para la comunidad LGBT. Lo que sea, pero el Calzona se queda, aunque tengamos que darle unas nalgadas a la amiga Arizona por haberse portado como una guarra mala persona. ¿Estás conmigo o estás conmigo? ¿Qué crees que pasará en la décima temporada de Anatomía de Grey? Vota. Opina. Desahógate con un comentario. Comparte amor.