Ay omá… Estaba yo indecisa sobre de qué rubia hacer la entrada hoy, hasta que alguien ha dicho el nombre de Elizabeth y ese gran “Oh, yes!” que habéis oído todas en vuestras casas no ha sido producto de vuestra imaginación, he sido yo al pensar en esa mujer. ¡Mamma mía! Y luego han surgido más nombres, pero yo ya estaba perdida por completo desde que han nombrando a Elizabeth Mitchell. Y sé que M lo aprueba, y mucho.
Yo no soy muy de rubias, lo mío son las pelirrojas, pero debo decir que la belleza de esta mujer me tiene completamente anonadada. Esos ojazos que tiene, la boca, su forma de sonreír, esa mirada dulce e intensa… Uffff… Si yo seguramente hubiera dejado de ver Lost de no ser por ella (ok, es mentira porque estaba totalmente enganchada a esa serie, pero ella fue el punto más importante para continuarla con una sonrisa en la cara muriese quién muriese, y de eso teníamos un amplio abanico), pero yo sé que no es Lost todo lo que reluce y que nosotras, las croquetas, conocemos a Elizabeth desde mucho tiempo antes de que fuera Juliet. ¿Y por qué lo sé? Jujuju
Porque aquí todas nos conocemos ya y sabemos que en cuanto descubrimos una película bollo, ahí vamos de cabeza, y Elizabeth protagonizó junto a Angelina Jolie una en la que estaban juntas y revueltas, tan revueltas que no sabéis lo mal que lo estoy pasando para escribir este post y cuales son los gifs que no puedo poner porque somos una web decente y tengo unos calores encima que no quiero ni pensarlo.
La película en cuestión fue Gia, que quizás alguna quiera saberlo, y aunque el trailer no promete nada interesante, os aseguro que vale la pena echarle un ojo, y a poder ser, un par de manos también, pero eso ya es algo más complicado.
Si no la has visto, cosa que dudo, no sé qué haces que sigues leyendo esto en lugar de descargar esa maravilla para los ojos que es ver a Elizabeth y Angelina retozar en la cama, en al ducha y en todas partes. Aunque posiblemente ninguna siga leyendo esto porque he puesto esos gifs por ahí y ya ni vale la pena que siga escribiendo nada más.