Estados Unidos está viviendo estas semanas una mala racha en cuanto al avance de los derechos del colectivo LGTBI. Obligar a las personas trans a usar los baños según el sexo que les fue asignado al nacer y no el suyo real, permitir la denegación de servicios y empleos por razón de orientación sexual… son algunas de las perlas que estos últimos días están ocurriendo en territorio americano y hemos tenido que leer (por desgracia) en la prensa. La polémica de los baños públicos surgió tras la aprobación de una Ley de Carolina del Norte que obliga a las personas transexuales a usar los baños según el sexo que se les asignó al nacer y que ha provocado reacciones de todo tipo.
Lo que consigue esta Ley, además de pisotear los derechos y la dignidad de las personas, es convertir una actividad tan liviana y cotidiana como ir al baño en un auténtico suplicio. Para las personas transexuales que vivan en Carolina del Norte, hasta ir a hacer pipí será incómodo a partir de ahora. Pese a que las ha habido de todo tipo, algunas de las reacciones han sido muy positivas y esperanzadoras, con afán de revertir la situación.
Tras la polémica Ley de Carolina del Norte, la web y aplicación móvil creadas por una diseñadora web estadounidense han ganado mucha popularidad. El proyecto consiste en un mapa de Estados Unidos en donde se indican los lavabos públicos en los que las personas transexuales son “bienvenidas”. ¿Y eso quiere decir que en el resto de lavabos norteamericanos no lo son? Pues no tiene porqué, pero visto como está el panorama, una aplicación como esta era muy necesaria.
Refuge Restrooms se describe como una aplicación para “personas trans, intersexuales y personas sin género definido”, y surge después de que la desaparición de Safe2Pee (una plataforma de objetivo similar), dejara un vacío muy grande en esta cuestión. Por ello, y con la situación clamando su reaparición, Refuge Restroom ha vuelto a nacer cargando la base de datos de su app predecesora. Más de 120 lavabos fueron rescatados de la anterior aplicación, pero la lista ha ido actualizándose y creciendo mucho a partir de nuevas aportaciones de ciudadanos. De hecho, ya hay más de 250 lavabos registrados sólo en Carolina del Norte. La aplicación es totalmente gratuita y la web se mantiene gracias a las diferentes donaciones de usuarios anónimos.
Para que os hagáis una idea de cómo funciona la cosa, AQUÍ la web. Muchas otras personas defienden la difusión de la idea de baños “para todos los géneros”, que evitaría que polémicas de este tipo existieran. De hecho, esta es una idea que ya lleva casi un año materializada en La Casa Blanca, después de que Obama lo autorizara como un gesto de apoyo a la comunidad LGTB. Lo que no tengo tan claro es si la Casa Blanca también aparece en el mapa interactivo de Refuge Restroom…
Está claro que iniciativas como esta arrojan un rayito de esperanza en la oscuridad. Sin embargo, es inevitable pensar que es una lástima que ideas así hayan de surgir para arreglar los errores que la sociedad comete. Lo realmente bonito será cuando no hayan de existir “refugios” para nadie, porque todos seamos libres y aceptados.