Esta semana pasada, Vogue, nos ha alegrado con una entrevista a mi novia, digo… Alycia Debnam-Carey sobre cómo es trabajar en televisión y sus diferencias y similitudes con el mundo del cine desde el punto de vista de una actriz.
Es una entrevista que sabe a poco, pero es que claro, esta mujer puede dar un simposio sobre los caracoles y se haría corto igualmente.
En los dos, las jornadas de trabajo, que rondan una duración normal de 12 horas, son largas. “No sólo está el trabajo en sí mismo, sino que también el tiempo de viaje y el que se necesita para estar preparado. Una vez sumas todo, (…) puedes encontrarte trabajando 15 horas”. En televisión, además, todo va mucho más rápido que en el cine. En una película “tienes todo el guión completo y un par de semanas para aprenderlo, revisarlo y ensayarlo (…)” mientras que, cuando trabajas para una serie “no te aprendes el guión. Habitualmente, con algo como The 100, como trabajas tanto y a diario, y cambian los borradores tan rápido, que no tiene sentido aprendértelo el martes cuando el jueves va a ser totalmente diferente”. “A veces ni sabes lo que le va pasar a tu personaje”, dice.
Sus dos últimos papeles, Lexa en The 100 y Alicia en Fear the walking dead, son los que la han catapultado a la fama y reconoce que trabajar en ambas series ha sido increíble, pero cada una a su manera. Con The 100 consiguió un reconocimiento que nunca había esperado porque, en un principio, sólo había firmado por 6 episodios pero “de repente, se convirtió en una historia completa y un viaje increíble con un personaje que era impresionante”. En Fear the walking dead, al haber estado desde el principio, reconoce que llegó a conectar mas con la gente, lo que se transformó en una “sensación de familiaridad y familia”.
Vía: Vogue