Ya voy avisando de que esta entrada va a dar para el drama que tanto nos gusta y que probablemente sea porque muchas de vosotras os sentiréis identificadas y pensaréis que la loca soy yo (lo que, siendo honestos, tampoco sería TAN raro).
Esto de ser amiga de tus ex es un fenómeno que, aunque es cada vez más popular en general, yo creo que está llevado al extremo en el mundo croquetil. Y cuando digo llevado al extremo me refiero AL EXTREMO DEL PRECIPICIO.
Pensad en las bolleras que conozcáis y sus ex: no es sólo que se empeñen en seguir siendo amigas después de haberlo dejado, ¡es que son mejores amigas! Además de tener una relación cercana, ¡viven juntas! Después de dejarlo y acabar como el rosario de la aurora, ¡ahora es íntima de la nueva pareja de su ex! Lo tuvieron que dejar porque no paraban de ponerse lo cuernos, ¡ahora se lo cuentan todo!
Es demencial.
Yo eso lo entiendo y me parece precioso si había amistad antes de salir. El clásico “éramos mejores amigas desde pequeñas y empezamos a experimentar” o “nos presentó una amiga en común y nos hicimos amigas y la cosa acabó en algo más” o yo qué sé que qué sé yo.
Supongo que también tiene mucho que ver con la endogamia dentro de los grupos de amigas lesbianas (otro día hablaremos de esto con más calma) y con la putada que es de repente una pareja del grupo lo deje, así es mucho más difícil romper relación porque romperla con tu ex supone romperla también con tus amigas. Otra vez Ella Baila Sola y su “si nada es tuyo nada es mío cómo repartimos los amigos” y la solución Salomónica de SEGUIR SIENDO TODOS AMIGUITOS.
Pero me hace gracia cuando no es el caso.
“Quiero que sigamos siendo amigas”. Pero vamos a ver, ¿CUÁNDO HABÉIS SIDO AMIGAS? ¡Que os conocisteis en una discoteca, a las dos horas estabais en su piso y a los tres días te habías mudado con ella! ¿CUÁNDO?
“Es que, jo, no quiero que perdamos lo que teníamos antes por haberlo dejado”. ¿Antes de qué? Esta frase me desconcierta. Porque, no sé, antes de salir no teníais nada PORQUE NI SIQUIERA OS CONOCÍAIS. O igual te refieres a durante la relación y lo que no quieres perder son las broncas día sí día también. Me quedo loca. LOCA ME QUEDO.
“No quiero que perdamos la amistad”. ¿PERO QUÉ AMISTAD NI QUÉ NIÑO MUERTO? ¡Que habéis quedado siempre a través del Brenda y ni siquiera sabes su apellido, alma de cántaro!
Pequeño inciso para comentar que el otro día a modo experimental nos bajamos el Brenda en el piso (¿esto es hacer publicidad? ¿puedo poner esto aquí? Si no se puede que alguien edite esto y lo borre, aunque juro que no me pagan todavía).
La verdad es que no sé muy bien cómo salió el tema, el caso es que ninguna tenía muy claro cómo funcionaba, así que nos lo tuvimos que bajar, claro. ¡Y SORPRESA! ¡TODO LLENO DE BOLLERAS! A 100 metros. A 150. A 200. A 250. ¡MULTITUD DE LESBIANAS!
Lesbianas everywhere.
Que yo lo entendería si viviéramos en Chueca o yo qué sé, pero viviendo aquí me parece de otro planeta y no tenía ni idea de que tanta gente lo usara, pero esto ha ocasionado un gran problema en mi vida porque ahora cada vez que bajo a comprar el pan no puedo evitar preguntarme si cada chica con la que me cruzo es lesbiana.
Volviendo al tema anterior: ¿no os dais cuenta de que NO PODÉIS VOLVER A SER AMIGAS SI NUNCA LO HABÉIS SIDO? Igual soy la única que se da cuenta.
Con eso no quiero decir que no se pueda ser amiga de una ex o que haya que terminar sin hablarse y maldiciendo a todos sus ancestros, pero no entiendo esas moderneces de ser mejores amigas tras una ruptura.
Esto no lo entiendo ni siendo amigas de antes ni no siéndolo. No sé, digo yo que necesitarás un tiempo, asimilarlo, superarlo, curarte, ALGO, antes de oír los detalles de como tu ex se está tirando a otra y conocerla y poder sonreír sin que parezcas el puto Joker. Pero no sé, IGUAL SOY YO.
(Y si eso ya no lo entiendo, imaginad lo que me asombra que queráis “seguir” siendo amigas de alguien que ni siquiera estaba en vuestra vida antes de salir.)
Al final conseguís que piense que soy una tía un poco rara y que coja complejo.
Os parecerá bonito.