Aunque esto no es algo que me pase a mí frecuentemente, (digamos que tengo un carácter que se presta poco a hacer preguntas demasiado personales y la mitad de las personas con la confianza para hacerlas también son bolleras y no necesitan preguntar), sí me pasa de vez en cuando, y me dicen me comentan que es algo que no sólo me ocurre a mí.
Una vez más: ¡NO ESTOY SOLA! (Esta sección es maravillosa, probablemente ha hecho más por mí de lo que harían AÑOS de terapia.)
Sí. Ha llegado el día. Efectivamente, estoy hablando de la ya clásica pregunta: “y entonces, ¿las lesbianas cómo lo hacéis?”. “¿Pero cómo funciona?” “¿Y si no hay una polla cómo se hace?” O, mi más favorita: “¿y entonces hay una que hace de hombre?”
La audacia de la gente me fascina.
>De todas las cosas que odio como lesbiana (que ya son unas cuantas…) esta es probablemente la que más odio. Es la que me pasa menos a menudo, pero la que me parece una mayor falta de respeto.
Es como si pudieran preguntarte sobre tu vida sexual más personal POR QUE COMO ES DE BOLLERAS NO CUENTA.
El sexo entre bolleras es azúcar. Palomita blanca. Mantequilla. Burrito blanco. Va de bulto.
Vamos, que parece que sea una cosa como poca seria, así que se puede preguntar al respecto con toda libertad.
“Ya, bueno. Yo también tengo curiosidad por saber si se la chupas a tu novio y no te lo pregunto POR QUE ES UNA COSA PERSONAL Y SE LLAMA RESPETO.
Es que de verdad que es una cosa que no entiendo. Son un tipo de preguntas que JAMÁS le harías a alguien heterosexual, y menos sin apenas conocerle, pero parece que si se lo haces a alguien homosexual no pasa nada.
Pues vale.
En el nombre de la curiosidad y a veces con mucha educación te sueltan la pregunta y tú te quedas sin saber muy bien qué decir: “¿Te puedo hacer una pregunta un poco personal?” Pues tampoco le vas a decir que no a la chavala. (¿Por qué siempre lo preguntan mujeres? ¿Es por que tienen más curiosidad o por que los tíos saben perfectamente como funciona porque el porno se lo enseñó? (O creen que se lo enseñó, vaya.))
En realidad en este tipo de situaciones lo que te apetece es responder alguna bordería o preguntarles algo incluso más personal que lo que te han preguntado a ti (“¿Cuando se la chupas a tu novio, te lo tragas?”), pero como en el fondo eres gilipollas y te da pena sólo pensar en la cara de horror que pondría pues le contestas con toda la educación que puedes intentando no ser demasiado desagradable.
Y obviamente fracasas en el intento. (O al menos yo fracaso estrepitosamente y resulto muy desagradable.)
ESO LES ENSEÑARÁ.