Han pasado seis años, que se dice pronto, desde el final de The L word, pero la serie sigue teniendo la misma relevancia que el primer día, si no más. The L word fue la primera vez que veíamos en pantalla no una protagonista lesbiana, sino todo un grupo, un estilo de vida, una comunidad entera, la nuestra, reflejada en cada situación. No es poco. Y por eso mismo, por la inmensa repercusión que tuvo y sigue teniendo, a las protagonistas del show les siguen preguntando por él. Este es el caso de la guapísima y talentosísima Jennifer Beals, de la que estoy secretamente enamorada, que está promocionando su nueva serie, Proof.
Siempre tuve la esperanza secreta, incluso cuando estábamos grabando el piloto, de que la serie sería util para alguna chica joven que se identificara como lesbiana y que a lo mejor no tuviese acceso a una comunidad más grande, que pudiera verse representada de algún modo como un ser humano real en vez de ser alguna figura literaria en alguna película o show
También cuenta, en la misma entrevista, qué le aportó a nivel personal la serie:
Una de las cosas que aprendí estando en el show es que todos somos individuales. No puedes hacer generalizaciones acerca de la experiencia de alguien, ya sea gay, o hetero, o birracial, o blanco, o negro, o lo que sea. Tienes el honor de ser individual
La verdad es que sí, Jennifer. En The L word, cada una de las amigas del grupo era completamente diferente de la otra, a veces no entendíamos por qué motivo eran amigas, lo que no quita para que la serie nos siga encantando, y con cada visionado veamos una capa nueva. Una serie a reivindicar, absolutamente.
Vía: Huff