Por primera vez en Brasil una jugadora de voleibol trans ha podido jugar en las competiciones oficiales femeninas: la semana pasada Isabelle Neris alcanzó la aprobación de dicha federación. Esta atleta, que lleva más de 10 años ligados al voleibol, tuvo que vivir un largo proceso de cambios físicos, hormonales y psicológicos hasta que a finales del año pasado consiguió el permiso para cambiar el nombre y sus documentos de identidad. Isabelle presentó el documento de cambio de nombre legal, y las pruebas hormonales que demostraban que sus niveles eran similares a la de otras jugadoras (es un proceso obligatorio).
En mayo de 2016 se unió al equipo de las “Voleiras” tras la inspiración de la jugadora profesional Tiffany Abreul, que jugó en varios países de Europa, y también en la Liga Española. Ahora, como mujer trans, juega gracias a la obtención del permiso de la Federación Internacional de Voleibol.
Tiffany estaba jugando en un equipo masculino y luego vi que fue capaz de entrar en un equipo femenino. Un acto necesario para que yo no renunciase a mi sueño
Ella misma cuenta que vio la retirada de muchas mujeres trans en el mundo del deporte. “Debemos ir tras lo que queremos, somos la generación del cambio. La gente querrá que nos detengan, pero no debemos renunciar si es nuestro sueño ” insistió.
En España, la federación de voleibol tramitó el año pasado la licencia de Antía Fernández, mujer trans, pudiendo así jugar en el Calasancias gallego de la competición nacional femenina. Todo un avance, social y deportivamente. Y es que en este campo todavía nos queda mucho por recorrer.
Via: G1.Globo