Si os digo el nombre de Shonda Rhimes a muchas os sonará y os quedaréis pensando de qué. Y otras muchas, probablemente la mayoría, sabréis de sobra que se trata de la guionista y productora de una de las series más longevas de Hollywood. Aunque no le pongáis cara o en vuestra mente aparezca Oprah (sí lo sé, se parecen, pero no, esa no es… y no me miréis así. Me pasa también con Mel Brooks, Alanis Morissette y Shania Twain. Suene la canción que suene, para mí siempre canta Shania, pero esa es otra historia).
Divagaciones aparte, a estas alturas ya sabes perfectamente de lo que te estoy hablando ¿verdad? Exacto, Anatomía de Grey. En este momento te dejo que te sientes, porque ahora es cuando vas a sentir físicamente el paso de los años. Esta serie que transcurre en un hospital de Seattle empezó a emitirse nada menos que en 2005. Te dejo reposar un poquito y seguimos… ¿mejor? Yo también sufro mientras lo escribo, no te creas. Nada menos que 9 añazos en antena, por lo que muchas nos hemos ido acercando peligrosamente a la treintena desde entonces.
Y en ese tiempo (y quienes digáis que no estáis mintiendo como bellacas), hemos retomado la serie a trompicones. Porque por muy fan que seas de algo, el ser incondicional durante todos esos años pues… cuesta. Y a veces te preguntas si la sigues porque te continúa enganchando, por inercia o porque “dios mío de mi vida que acabe ya, que quiero saber el final y seguir con mi vida”. Este último sentimiento supone un punto de inflexión muy importante. Porque aquí es cuando has llegado a ese momento en el que en lugar de esperar una nueva temporada henchida de euforia e hiperactividad, sufres cuando lees esto: Anatomía de Grey ha renovado por otra temporada más.
Y de repente, sientes como una losa en el corazón porque sufres una evolución de acontecimientos parecida a esta:
1. “Mierda, joder. No me acordaba de que la había dejado a medias”.
2. Recuerdas que la dejaste en un parón de Navidad “de cuyo año no puedo acordarme”. Y por supuesto, no sabes en qué episodio. Claro. ¿PARA QUÉ LO IBAS A APUNTAR SI LA SEGUÍAS AL DÍA?
3. Cuando más o menos te suena la temporada que era, vas viendo episodios sueltos, hasta que te comes un mega-spoiler y dices vale. Aquí me quedé.
4. Una vez que te comes el mega-spoiler es cuando te das cuenta de que te quedan 3 temporadas por ver. Y entonces lloras. Porque es un largo camino hasta que la veas toda y, además, sabes que vas a sufrir y mucho.
Pero no seamos derrotistas ni malas con Shonda; a fin de cuentas, no es su culpa que no pueda parar de crear. Además, la próxima temporada tiene una pinta tremenda. Dicen que caerá un meteorito en el hospital y que habrá muertes inesperadas de personajes super importantes. ¿Quiénes serán los fallecidos esta vez? ¿El nombre del hospital pasará a llamarse Armaggedon Memorial Hospital? ¿Morirá Grey? Entonces la serie debería pasar a llamarse Anatomía de Karev o Anatomía de Bailey ¿no? Por aquello de tener en cuenta la antigüedad…
Ahora hablando en serio, creo que después de todos estos años y aun tratándose de mi relación más larga hasta la fecha, estoy pensando plantarme en la temporada 10 y a lo mejor ver los resúmenes del Calzona en las siguientes, para comprobar cómo acaba la cosa y no quedarme a medias. Pese a que ha habido momentos decisivos en los que debería haber dicho “hasta aquí hemos llegado”, creo que el anuncio de que habrá una temporada más es, para mí, la gota que colma el vaso. Así que con todo el dolor de mi corazón y a pesar de los momentos inolvidables juntas: se acabó, Shonda. Te dejo. Esta relación ya no va a ninguna parte.
Yo no sé qué tienen los 80, pero no podrían ser más cutres y no podíamos echarlos más de menos. Esos pelucones. Esos flequillos. Esas mallas de leotardo que alguien les engañó para hacerles pensar que les sentaban bien. De veras… se me salta la lagrimita al recordarlo. Qué tiempos tan horteras y tan felices. Pero al tema, que empiezo a divagar y no paro.
Elena Anaya tiene nueva película. Se llama Todos están muertos y en ella la actriz española interpreta a Lupe, una estrella del pop de los 80, que forma parte del grupo Groenlandia y nos va por la vida de esta guisa:
A Lupe desde que murió su hermano todo le da agorafobia y ya no sale mucho de casa. Pero su madre tiene el remedio. Ella sabe cómo ayudarla con unos conjuros caseros que la ayudarán a superar este trauma. Lo que ocurre es que esos conjuros… bueno… acabarán trayendo del mundo de los muertos a su fallecido hermano (no sabemos si con un órgano Roland bajo el brazo).
Tenemos que confesar que la película tiene muy buena pinta y, claro, que Elena Anaya esté en ella le da un plus croquetil de lo más apetecible. Se nos despierta el hambre solo de pensarlo. Y ahora Todos están muertos tiene su propio videoclip, que se ha presentado en exclusiva para MSN,así que podéis verlo siguiendo este link. Hazlo sobre todo si eres fan de la actriz. No tiene desperdicio. ¡Arriba los 80!
Hace mucho, mucho tiempo, en una galaxia muy muy lejana os dijimos que pocas series no-gays son más gays que Once Upon A Time. Creo que en ese momento nadie lo puso en duda. Pero por si quedaba algún pobre incrédulo, entonces llegó Mulán para darnos la razón. Y ahora llega Elsa, la princesa de hielo de Frozen, para despejarnos ya todas las dudas. ¿En serio alguien sigue pensando que OUAT es una serie sin personajes LGBT? Espera, que voy a buscar unas pastillitas porque creo que las necesitan.
En el doble episodio del final de temporada de la serie de ABC, nos ha dado a los fans el sorpresón de introducir al personaje de Elsa en la serie, cuya incorporación está hiper confirmada para la cuarta temporada. Y, claro, Tumblr y todas las redes sociales han estallado de la emoción. ¡Porque es Elsa! La princesa no-lesbiana más lesbiana del planeta, con permiso de su compañera Mulán.
https://www.youtube.com/watch?v=2djenBrc3c4#t=166
El productor Eddy Kitsis dice que lo que más aman del personaje de Elsa es que “fuera considerada una villana aunque realmente no lo fue. Solo era una incomprendida. Es gracioso porque muchas personas nos preguntan si Disney nos pidió que la metiéramos en la serie y es todo lo contrario. Realmente es complicado conseguir a estos personajes para el programa. Nos sentimos muy honrados de que Disney nos haya permitido usar este juguete para jugar con él”.
Estas declaraciones son muy interesantes o, al menos, a mí me lo parecen. Yo hasta ahora no sabía que Disney tenía que dar el “beneplácito” sobre los personajes. Aunque tampoco se me había ocurrido planteármelo. Y si lo pensáis, eso significa algo todavía más importante y es que en su momento le dieron el OK al enamoramiento de Mulán por Aurora. Que ya sabemos que la cosa se quedó en un quiero y no puedo, pero menos da una piedra y descubrir que la aprobación de Disney está detrás de todo esto nos hace ver la luz al final del túnel.
Por lo demás, seguimos sin saber quién dará vida a Elsa. Es un misterio quién es la propietaria de esa espalda tan bonita. Pero ya no puedo esperar para averiguarlo. OUAT se pone más interesante que nunca.
La semana pasada os contábamos que una de nuestras exlobitas favoritas, Adriana Torrebejano, había vuelto a las andadas interpretando a una lesbiana en Ciega a Citas. Y esta semana tenemos la suerte de que hemos pasado de la teoría a la práctica.
Bea, el personaje interpretado por Torrebe en esta serie de Cuatro, ha compartido un encuentro labial de lo más interesante con Irene, que lo acaba de dejar con su novio con quien, por cierto, se iba a casar. Irene tiene dudas respecto a su orientación sexual y consulta a un par de amigos gays las clásicas preguntas de esa fase: ¿Y cómo es eso? ¿Cómo sabes si…? ¿Cuándo descubres que…? ¿Cómo se lo montan las croquetas? ¿Hace falta mucho o poco aceite en la sartén para cocinarlas? Ya os podéis hacer una idea.
El padre de Irene, además, se pasa todo el episodio sospechando que, a lo mejor, su niña a lo mejor es masa de pastelería. Buenas razones al señor no le faltan por lo que vemos a continuación:
Si es que el roce hace el cariño, y compartir cuarto hace la croqueta, está claro. Nos ha cortado el rollo un poco la madre asomando la nariz por la puerta, pero cruzamos los dedos para que esto solo sea el principio. Así que nada, a disfrutar.
¿Estás viendo la serie? ¿Qué te ha parecido? ¿Irá esta relación a más o lo dejarán aquí?
No sabemos quién es esta misteriosa rubia, pero sí sabemos una cosa: hoy toooodo el mundo habla de ella, bien porque a algunas les gustaría estar en sus zapatos o… simplemente, porque la gente se pregunta: ¿es esa la novia de Ellen Page?
Desde que la actriz de 27 años salió del armario el pasado Día de San Valentín, nadie la había visto en actitud cariñosa con otra mujer. Al menos públicamente (no, lamentamos deciros que todavía no sabemos qué hace Ellen en la oscuridad de su casa, pero estamos investigándolo).
Las noticias que teníamos eran que el corazón de la actriz estaba desocupado, pero desde este domingo ya no lo tenemos tan claro.
Así de bien acompañada la han fotografiado durante un paseo por Nolita, uno de los barrios de Nueva York:
Hasta ahora nadie le ha puesto nombre a la misteriosa rubia, pero ya se sabe que estuvieron de compras en McNally, que disfrutaron de un refrigerio en Cafe Habana y que al su regreso a casa (no sabemos la de quién) hicieron una parada técnica en un supermercado para hacer la compra.
A la vista de las fotografías, a nosotras nos parece que bien podría ser una buena amiga con un mal peinado. O su tía. ¿Tal vez una follamiga? O incluso el amor de su vida. Qué sé yo, las posibilidades en este caso son infinitas. Tenemos claro que las dos mujeres son muy cercanas, pero queremos foto con beso o no ha ocurrido.
Durante muchísimo tiempo, y estamos hablando de más de una década, Michelle Rodriguez tuvo como tema principal en toda entrevista que concedía lo no-lesbiana que era. Pero eso fue hasta el otoño de 2013 donde, por primera vez en la historia, la actriz reconoció que “había jugado para los dos equipos”. Y ahí se quedó un poco la cosa, no volvió a hablar del tema hasta este fin de semana, donde hizo de DJ en un evento benéfico a favor de Los Angeles Gay & Lesbian Center y habló de su salida del armario, cómo ha cambiado su vida y cómo quiere servir de inspiración para otras.
Está bien, o sea, lo que sea. No le doy mucha importancia a las opiniones de la gente, ¿sabes? A menos que sea alguien al que realmente respeto. No me importa lo que la gente extraña tenga que decir. Peor me doy cuenta de la importancia de tener la valentía de vivir tal y como eres, y siento que mucha gente no tiene esa valentía
Viniendo de alguien que estuvo diez años negando la mayor, aún cuando TODO EL MUNDO sabía que, por ejemplo, su pareja era Kristanna Loken, no está mal. Gran cambio a mejor. Respecto a que pueda servir de ejemplo para alguien, la actriz dijo:
Quizá abriendo mi bocaza como hago habitualmente y dando un paso adelante para tomar las riendas de quien soy, quizá pueda inspirar a alguien para hacer lo mismo
Nada dijo la actriz de los rumores que aseguran que su relación con Cara Delevingne ha llegado a su fin. Lo cual nos parecería una pena, porque las dos juntas nos dan momento muy, muy buenos.
Una de las novedades que mejor pinta tienen de cara al curso que viene es One Big Happy. Esta serie, de la que hemos seguido con interés todo el casting y producción, ha recibido por fin la luz verde para una temporada entera. Producida por Ellen DeGeneres esto era casi seguro, pero siempre puede pasar una catástrofe, qué sé yo. Así, a partir de enero, la llamada midseason, podremos disfrutar de la historia de Lizzy, lesbiana, y Luke, su mejor amigo, quienes son muy cercanos desde la más tierna infancia y, finalmente, deciden tener un bebé juntos. Los planes se trastocarán con la aparición de Prudence, por quien Luke pierde la cabeza. En NBC la anuncian como ‘una clase diferente de familia’, y si, es una clase de familia a la que no estamos acostumbradas.
Por otra parte, los actores ya han plasmado sus primeras impresiones sobre qué les parece el show, y lo involucrada que está Ellen en el proyecto. Nick Zano, quien interpreta a Luke, habló del día de la grabación, con público, del episodio piloto:
Ellen estuvo como diez minutos ‘calentando’ a la multitud. Oímos a Ellen haciendo un monólogo, y a los espectadores gritando y era como… ‘Vaya, espero que nosotros seamos tan divertidos como ella’. Dejó el listón muy alto, nosotros sólo teníamos que acercarnos
Elisha Cuthbert dejó muy claro que está encantada con su papel:
Interpreto a una lesbiana, la lesbiana más guay del planeta
Que los actores estén contentos con el show siempre es buenísima señal. ¿Será One Big Happy nuestra nueva comedia favorita?
Una de las cosas por las que se distingue Orange is the new black es por su estética. Canalla, desenfadada y que no deja indiferente a nadie, los carteles promocionales que hoy ha desvelado en exclusiva Afterellen, la biblia de todas aquellas a las que nos gusta el entretenimiento lésbico, siguen esa línea. A mi me han encantado.
¿Puede Laura Prepon ser más guapa y arrebatadoramente sexy? Porque yo creo firmemente que #no. En serio, es un escándalo. Que llegue ya el 6 de junio o me dará un infarto.
El #Karmy es ya un hecho, amigas. Como lo es el #Brittana o el #Calzona o el #Faberry. Tenemos nueva pareja en el barrio croqueta y, al parecer, no solo frente a las cámaras, sino también tras ellas.
Si no estás viendo Faking It es muy probable que no te enteres de nada de este post, pero si eres ya fan, como lo somos nosotras, comprenderás por qué nos entran ganas de dar palmaditas o bailar en pelotas los anuncios de la tele cuando nos enteramos de que las actrices que interpretan a Amy (Rita Volk) y Karma (Katie Stevens) en la serie de la MTV son candidatas a un Amigas sin derecho a roce (pero que deberían tenerlo).
Oh, ¿qué he hecho yo para merecer este beso?
Las actrices se han hecho tan amigas rodando Faking It que se pasan la vida subiendo selfies a sus cuentas de Instagram y demás redes sociales. Rita incluso llegó a decir en su Twitter que rodando este show ha ganado a una de las mejores amigas que podía pedir. Y como tú y yo somos criaturas débiles, incapaces de resistir la tentación de dos mujeres guapas, volveremos a rendirnos a los pies de este promance. Como hicimos antes. E incluso mucho antes. Como hemos hecho siempre.
El #Karmy está postulándose para ser el sucesor del #Faberry y por eso… CAEREMOS, pero no te preocupes, que al menos lo haremos juntas. Agárrame la manita mientras disfrutamos del salto:
En serio: ¿Por qué siempre una de la pareja es rubia?Lo que algunas pagarían por que Amy les susurrara así de cerca.Sacando el sexy que llevan dentro.Los contenidos adicionales: mi momento favorito de toda producción-Si vas a los premios MTV, esto es exactamente lo que haces: pegarte a tu amiga para sacarte selfies. ¡A ESTO LE LLAMO YO BUEN KARMA!
Rachel Spangler no se había planteado ser escritora. O tener éxito con ello. Pero un día decidió probar suerte y enviar su obra a una editorial. La respuesta le llegó un poco más tarde, en una llamada de teléfono a cuyo extremo se encontraba una de las autoras de ficción lésbica más reconocidas a nivel internacional. El resto… es historia. Con varios premios a sus espaldas y ocho novelas lésbicas en su haber, esta entusiasta de la cultura y el idioma español nos ha concedido un rato para charlar con ella sobre su trayectoria literaria. No te lo pierdas:
Hay Una Lesbiana En Mi Sopa: Tenemos que confesarte algo… nos encanta el perfil de autor que tienes en Egalés. Esto es lo que dice “Rachel Spangler evitó conseguir un trabajo de verdad estudiando en la universidad durante mucho tiempo y adoró cada minuto (o casi) de esa época”. Así que hemos de preguntártelo: ¿De cuánto tiempo estamos hablando?
RACHEL SPANGLER: De hecho, estuve en la Universidad Estatal de Illinois durante un total de seis años. Estoy licenciada en Política y Gobierno y cursé estudios en Inglés y Estudios de la Mujer. Después de completar eso me lo estaba pasando tan bien que decidí quedarme y sacarme un Máster en Educación en Asuntos Estudiantiles. Me encantaban todos mis estudios y de vez en cuando saco algo de ellos en mis libros, pero nunca he trabajado en ninguno de estos campos desde que me gradué. Con todo, no me arrepiento ni de un solo minuto de esa época. Aparte de que fue muy divertida, mis años en la universidad me dieron la libertad y la inspiración para empezar a escribir mis libros, así que todavía pienso que fue un dinero bien invertido.
HULEMS: Es muy sencillo encontrar información sobre ti en Internet. Creo que eres una de las autoras de ficción lésbica que más presencia tiene en la web. ¿Te ayuda esto a estar en contacto con tus fans?
R.S.: En la “vida real” soy una persona de buen trato y muy accesible, así que no me sorprende que también dé esa impresión online. Nunca he rechazado una solicitud de amistad en Facebook, siempre trato de responder a todos mis e-mails, pero soy una persona extrovertida, por lo que me sale de manera natural. Me encanta hablar con las lectoras. Aunque no estoy segura de que yo esté más en contacto con ellas que otras escritoras. Simplemente me gusta conectar con la gente. Hablar con las lectoras me da mucha energía para ponerme a escribir, así que obtengo tanto como lo que doy.
HULEMS: ¿Y no te da un poco de miedo? Sabemos de algunos casos de autoras cuyas fans a veces se extralimitan un poco…
R.S.: Tristemente, sí que ha habido algunas personas que han tensado demasiado la cuerda. Pero afortunadamente nadie me ha amenazado. Es solo que algunas personas esperaban respuestas inmediatas o que les hiciera un hueco en mi tiempo. A la gente que presiona demasiado, las corto rápidamente. Me cierro en banda. Tengo un hijo pequeño y por muy abierta que pueda ser, soy muy protectora con mi familia y con el tiempo que pasamos juntos. No tolero que nadie sea irrespetuoso con ese tiempo o con esas relaciones. Puede que yo sea una figura pública, pero ellos no lo son. Por fortuna, la mayoría de la gente lo entiende así.
HULEMS: Muchas autoras nos cuentan que reciben bastantes reacciones por parte de sus lectoras. ¿Qué email/carta te ha conmovido más?
R.S.: Es muy complicado elegir porque tengo la suerte de estar en contacto con muchas lectoras maravillosas. Me encanta oír que la gente ve sus propias vidas o sueños reflejados en mi historia. Tuve un par de personas que me dijeron que mi trabajo les había inspirado para reconectar con gente de su pasado, lo cual es estupendo. Algunos otros incluso mencionaron que mis escritos les ayudaron para salir del armario o para recobrar su fe. Esos son probablemente los que más me han conmovido. Es muy gratificante saber que algo que he escrito puede inspirar a alguien a que enriquezca su propia vida.
HULEMS: ¿Y cuál sería el comentario más loco que has recibido? Ya sabes lo que dicen: se cuenta el pecado, pero no el pecador.
R.S.: Tengo la suerte de que la mayoría de mis experiencias con las lectoras son buenas. Tenemos una comunidad maravillosa. Supongo que la situación más loca me ocurrió con una mujer que le dio a uno de mis libros una reseña negativa, luego me acusó de acosarla y de atormentarla por ello. Yo ni siquiera leo las reseñas a no ser que su autora me pida que lo haga, e incluso entonces a veces me niego. Desde luego no voy buscándolas. Nunca había escuchado hablar de esta persona hasta que mis amigos me informaron de unos posts que ella había escrito diciendo que yo la estaba atacando por todo internet. Qué locura. ¿Pero qué puedes hacer, salvo menear la cabeza con incredulidad? No quiero permitir que gente así cambie quien soy o lo que hago. Las personas que me conocen incluso solo un poco saben cuán absurdo fue esto, y con eso me basta.
HULEMS: Tienes un vídeo en YouTube que se llama ‘It Gets Better’ (Todo Mejora). En él explicas tu propia historia, cuando saliste del armario, y el problema que supuso para ti ser lesbiana en una pequeña población y en el seno de una familia muy religiosa. Cuéntanos un poco más de esto. ¿Qué te inspiró para compartir tu historia personal con otras personas?
R.S.: Grabé ese vídeo en mi 28 cumpleaños. Estaba haciendo una introspección sobre quién era y lo lejos que había llegado. Cuando estaba en el colegio nunca habría pensado que mi vida podría ser lo maravillosa que es ahora, y quería compartir ese mensaje con otras personas que estén atravesando momentos parecidos. Porque es un viaje. Nadie de nosotros somos los mismos que éramos hace diez años. Yo no lo soy, no lo son mis padres, ni siquiera el mundo lo es. Se ha convertido en un verdadero cliché eso de decir “todo mejora”, pero para mí lo hizo. No pasó de la noche a la mañana, pero aguantando y manteniendo la fe, he visto un gran progreso, tanto a nivel personal como en mi país. Espero que consiga inspirar a otras personas. Si esa historia ayuda solamente a una persona, entonces soy feliz.
HULEMS: ¿Cómo se pasa de ser una adolescente que piensa en el suicidio como vía de escape a su orientación sexual a una autora premiada y reconocida a nivel internacional?
R.S: Con mucha fe, mucha esperanza y mucha ayuda en el camino. La época previa a cuando salí del armario fue muy oscura para mí, pero cada paso que daba hacia delante, siendo yo misma, mi verdadero yo, me volvía un poco más fuerte y un poco más feliz. Salir del armario no fue fácil, pero cada vez que lo hice me ayudó a crecer. Haber estado en una universidad con estudiantes y profesores que me apoyaron ayudó mucho a mi autoestima. Aunque he de decir que lo que más me salvó fue enamorarme. Mi mujer y yo empezamos a salir cuando teníamos diecinueve, y hemos estado juntas desde entonces. Esa experiencia, más que ninguna otra, me hizo escribir novelas románticas. Cualquier éxito que haya tenido desde entonces se le puede atribuir también a ella, por eso todas las dedicatorias que le hago en mis libros dicen que todo es culpa de ella. ¡Realmente creo en el poder del amor para transformar una vida porque yo lo he vivido!
HULEMS: Por lo que hemos podido leer, te sorprendió mucho cuando supiste que tu primera novela había sido elegida para ser publicada. Háblanos de ese momento. ¿Lo recuerdas? ¿Dónde estabas, con quién estabas, cómo fueron tus reacciones?
R.S.: Sí, en ese momento yo solo escribía como pasatiempo. Al principio ni siquiera tenía planeado escribir una novela completa. Solía escribir cuando me aburría en clase. Solo escribía para mí misma, no para nadie más, pero a veces mis amigos veían que las páginas se acumulaban y me decían que las enviara a una editorial. Yo no pensaba que hubiera ninguna oportunidad de que me publicaran, así que me quedé muy sorprendida cuando recibí un correo de Len Barot/Radclyffe preguntándome si me podían llamar y hablar. Por supuesto que dije que sí. De hecho, cancelé un viaje a la nieve para poder coger esa llamada. Recuerdo exactamente dónde estaba sentada cuando ella llamó (ahora mismo estoy sentada justo en ese lugar). Recuerdo a mi mujer sentada a la mesa del comedor, desde donde podía oírme, pero no verme. Yo estaba intentando actuar de manera normal y en tono de negocios, pero estaba nerviosísima. Hablamos alrededor de una hora sobre el libro y la industria literaria, y casi no recuerdo nada de lo que ella dijo de lo emocionada que estaba. No estoy segura de que yo dijera mucho. Me pareció algo irreal. ¿Cómo era posible que una editorial quisiera publicarme? Yo no era una escritora al uso. Nunca había planeado ser escritora. Todavía estaba en la universidad. No parecía posible, pero esa sensación todavía perdura. Incluso ahora todavía parece surrealista que haga esto para ganarme la vida.
HULEMS: Hablemos ahora de tu trabajo literario. Tu primera novela, ‘Learning Curve’, está ambientada en una ciudad universitaria. ¿Dirías que, a veces, para escribir, sobre todo si es la primera novela, es importante ceñirse a temas que son familiares para la autora?
R.S.:Learning Curve fue el primer libro que escribí y, desde luego, escribí en él sobre lo que conocía. Todavía estaba en la universidad el tiempo que me llevó escribir Learning Curve, y que creo que en él puedes ver mi vida reflejada en sus páginas más que en ningún otro libro. Uno de los personajes principales es una profesora de universidad que está inspirada en una mujer que yo admiraba mucho en ese momento. La otra protagonista es una “butch” de clase obrera que tiene mucho que ver con mi propia experiencia. Una gran parte de ese libro fue un intento por reconciliar esos dos mundos.
HULEMS: Y ‘Cruce de Pistas‘ (‘Trails Merge’, en inglés) está inspirada en una estación de sky, que hemos sabido que es un deporte que te encanta.
R.S.: También tiene mucho que ver con escribir sobre lo que me gusta. Empecé a esquiar cuando todavía no me había licenciado (el día antes de mi boda en Vermont) y me enamoré de este deporte. En la escuela de postgrado hice un viaje a las pistas de Big Powerhorn Mountain, en MIchigan, con unos buenos amigos. Pasamos una semana esquiando y quedándonos en una cabaña en la ladera de la montaña. Fue como estar en el paraíso, y yo no me quería ir, así que empecé a escribir Trails Merge/Cruce de Pistas, lo cual me permitió visitar ese lugar en mi imaginación durante meses. Creo que mi amor por ese escenario lo convirtió en un libro más fuerte. Todavía esquío habitualmente con mi familia, y siempre que por el cruce de pistas que ilustra la portada del libro en inglés, la pincho con los bastones en un pequeño reconocimiento a Parker y Campbell.
HULEMS: Esa misma novela tú la describiste como una historia sobre la familia. En ella descubrimos la historia de Parker y Campbell, dos mujeres muy diferentes. Diferentes orígenes, diferentes pasados y, por descontado, diferentes maneras de relacionarse con sus familias. Hemos notado que las relaciones familiares normalmente acaban abriéndose paso en tus argumentos. ¿Dirías que esto es un reflejo de tu propia experiencia?
R.S.: Sí, la familia es muy importante para mí, y creo que es un tema al que volveré mucho en mi carrera porque es una gran parte de mi propia vida. Procedo de una familia grande, cariñosa y ruidosa, con muchos tíos y tías y primos. Tengo una buena relación con mis padres y también con mi hermano. Y ahora he empezado mi propia familia con mi mujer y mi hijo. Muchas de estas relaciones son complejas y tienen muchas capas, y me fascina ver cómo me han hecho la mujer que soy hoy.
HULEMS: ‘Cruce de Pistas’ es también la única de tus novelas que ha sido traducida al español. ¿Vendrán más? Si seguimos con esta sequía estamos planeando organizar una colecta aquí, en HULEMS, para traducir a más autoras americanas. No, ahora en serio, ¿qué opina tu editorial sobre esto? ¿A quién tenemos que reñir?
R.S.: Bueno, si dependiera de mí yo tendría todas y cada una de mis novelas traducidas, y creo que a mi editorial también le gustaría que ocurriera eso, pero no depende solo de nosotros. Las traducciones las hacen las editoriales españolas, por lo que pueden elegir en qué libros quieren invertir. Estoy segura de que también escuchan que libros quieren sus lectoras que se traduzcan. A mí me encantaría que mis lectoras españolas contactaran a Egalés y les pidieran mis títulos. Creo que esa podría ser la manera más efectiva de ver más impresas en español, y nada podría hacerme más feliz.
HULEMS: Nos parece más curioso incluso el caso de ‘Spanish Heart‘ porque esta novela está completamente ambientada en España, pero tampoco ha sido traducida. Sabemos que lo que te llevó a escribir esta fue un viaje que hiciste por nuestro país hace muchos años, así que esta pregunta es obligatoria: ¿Qué opinas de España? ¿Te sigue gustando incluso ahora que (casi) todas las noticias sobre el país son malas?
R.S.: Siempre amaré España. La novela Spanish Heart está basada en mi propia experiencia de sentir como sentí que dejaba un trozo de mi corazón allí. Sé que España está ahora mismo atravesando un momento muy complicado a nivel nacional (al igual que otros sitios en el mundo), pero no me enamoré de España por su economía o por sus líderes. Me enamoré de su gente.
Tal y como has dicho, hice mi propio viaje por el país y seguí una ruta similar a la que sigue la protagonista de esa novela. También, al igual que Ren, yo era joven y todavía estaba descubriendo cosas sobre mí misma y de repente me arrojaron a una nueva cultura. Yo no hablaba el idioma demasiado bien. Me dieron muy pocas instrucciones, pero en ningún momento me perdí o me sentí insegura. En cada sitio que visité la gente era abierta y generosa. Ya había estado en Inglaterra, Francia y Alemania, así que tenía un poco de experiencia en lo de viajar al extranjero, pero nunca me sentí tan bienvenida como me sentí en España. La gente me daba de comer y me ayudaba a ir de un lugar a otro y mostraban mucho interés en hablar conmigo sobre su tierra. Nunca me metieron prisa o me hicieron sentir mal por no saber algo. Tuve la oportunidad de deambular y probar cosas nuevas y aprender cosas nuevas. Me encontré a mí misma allí y realmente me zambullí en la cultura. Me sentí más en casa allí de lo que a veces me siento en algunos lugares de Estados Unidos. Espero que todo eso se viera en el libro.
Todavía tengo muchas esperanzas de volver allí algún día. Estoy tan decidida a hacerlo que tengo a mi hijo de seis años metido a clases de español una vez a la semana. También tenemos una fiesta española en mi jardín cada verano. Tengo este sueño loco de hacer un taller de escritura allí o residir allí en el futuro. De vez en cuando barajo la idea de hacer un tour lésbico de ficción por España con Catherine Friend, que también ha escrito dos romances ambientados en España. Podríamos viajar por el país y mostrarles a las lectoras los lugares de los que escribimos. ¡Ahora, si pudiera encontrar a un mecenas rico que hiciera este sueño realidad todo sería perfecto! Si alguna de vosotras conoce a alguna mujer española rica a la que le encante la ficción lésbica, que me la envíe.
HULEMS: En Spanish Heart también vemos que la protagonista sufre un episodio extremadamente duro. No queremos hacer ningún spoiler, ¿pero cómo fue para ti escribir una escena así de difícil?
R.S.: Tengo una respuesta muy física a las escenas intensas. Con la que estás hablando recuerdo que temblé y sudé mientras escribía. En todo momento quería irme para describir el club o las luces o la música, cualquier cosa que me distanciara del horror de lo que allí estaba ocurriendo, y creo que Ren también lo desea así durante un momento. Trata de mantener la compostura y ser analítica, pero tuve que quedarme con ella hasta que se aclaró.
Como escritora, puse a mi persona en una situación muy difícil. Le debía a ella y a las lectoras quedarme con ella mientras el terror surgía y crecía, y luego mengua cuando ella se da cuenta de lo que acaba de hacer. Por supuesto, después todas esas emociones crecen como una gigantesca ola de realización que, una vez más, no pude pasar por alto por mucho que quisiera decir eso de “¿Ya hemos acabado? ¿Podemos seguir ahora?”. Es un punto de inflexión para el personaje y para el libro. Me siento como si hubiera destrozado el corazón de todo el mundo, incluido el mío, pero a veces la vida tiene que hacer estas cosas para crear algo nuevo. Es duro y agotador, pero vale la pena.
HULEMS: ¿Es la escena más dura que hayas escrito? Si no es así, ¿cuál dirías que lo es?
R.S.: Sí, en su momento, fue el mayor reto de mi carrera. Hay una escena en mi último libro, Timeless, que te deja con el mismo dolor de corazón, pero no estoy segura de que podría haberla escrito sin tener la experiencia de escribir la de Spanish Heart. Eso se aplica, de hecho, a todo el libro. Timeless no podría existir sin que yo aprendiera las cosas que aprendí con Spanish Heart.
HULEMS: Otra de tus novelas que hemos tenido la suerte de leer es ‘Learning Curve‘. Y en ella encontramos a Ash, la atractiva y seductora lesbiana incapaz de sentar la cabeza. Ash va de cama en cama casi cada día. ¿Estas lesbianas de veras existen? Y si es así, ¿dónde están? Porque tras haber leído este argumento en muchas novelas americanas, estamos empezando a pensar que solo pasa en Estados Unidos (y, consecuentemente, ya estamos mirando formas de mudarnos allí).
R.S.: ¡Esta pregunta es muy divertida! Tengo que decir que conozco a muchas más mujeres a las que les gusta pensar que pueden vivir de esta manera que aquellas que lo hacen en realidad. Conocí a un par de estas mujeres en la universidad, o al menos en la ciudad en la que fui a la universidad. A lo mejor necesitáis encontrar una ciudad universitaria que tenga un bar lésbico. Estoy segura de que cualquiera de nuestras lesbianas universitarias estaría encantada de conoceros.
HULEMS: Bromas aparte, de ‘Learning Curve’ nos gustó especialmente el personaje de Tess. Ella es una adolescente con un futuro prometedor, pero que atraviesa una situación difícil motivada por las fuertes creencias religiosas de su madre. Para nosotras Tess le da a ‘Learning Curve’ una profundidad extra. Es triste saber que todavía hay muchas adolescentes que se sienten tan perdidas como Tess porque no tienen la suerte de tener una Ash o una Carrie en sus vidas.
R.S.: Estoy de acuerdo. Como he dicho, tenía solo 20 años cuando empecé a escribir ese libro y el personaje que primero se desarrolló en mi mente fue el de Tess. Todavía siento muy cerca la frustración y la impotencia en la que ella vivía. Yo hacía mucho trabajo de voluntariado con nuestro grupo del PFLAG local (Padres, Amigos y Familiares de Gays y Lesbianas), por lo que nuestros jóvenes y sus sistemas de apoyo estaban muy presentes en mi mente y en mi corazón. Me sentí en una obligación para con ellos y quería dejar claro a toda la gente que lo leyera que solo porque sobrevivamos a nuestras adolescencias y salgamos de ellas no significa que hayamos superado todos los problemas. Todavía creo de veras que, como comunidad y como individuos, tenemos la responsabilidad de mostrarnos agradecidos con todos aquellos que nos precedieron y ayudar a todos lo que vendrán detrás de nosotros.
HULEMS: La fe extrema de la madre de Tess tiene cierto parecido a los residentes de la ciudad en la que se ambienta ‘The Long Way Home‘. Háblanos un poco del cambio personal que experimenta la protagonistas, desde el momento en el que llega a la aldea hasta el final del libro.
R.S.: En The Long Way Home, nuestra protagonista abandona su ciudad natal después de haber tenido una mala experiencia al salir del armario con sus padres. Entonces se hace famosa viajando por el país, criticando la ciudad y sus costumbres, pero diez años más tarde, debido a las circunstancias, se ve obligada a aceptar un trabajo en esa ciudad. Vuelve enfadada y asustada y todavía con la mentalidad de sus diecisiete años. A lo largo del libro se verá obligada a interactuar con muchas personas a quienes ha juzgado duramente. También se empieza a enamorar de alguien a quien juzgó mal. Esas experiencias la obligan a darse cuenta de que a lo mejor ha estereotipado demasiado.
HULEMS: ¿Qué tienes ahora en proyecto? Hasta el momento has publicado ocho novelas. ¿Qué otras mujeres están en tu cabeza esperando a que sus historias sean contadas?
R.S.: Timeless acaba de salir justo el mes pasado, así que estoy disfrutando de eso un poco. Está ambientada en la misma ciudad que The Long Way Home, y fue muy divertido escribirla, por lo que me encanta poder compartir eso con mis lectoras. También estoy acabando el primer borrador de Heart of the Game, que saldrá en marzo de 2015. Es sobre una periodista de deportes que se enamora de una madre soltera. Me ha permitido hablar mucho de dos de mis cosas preferidas: baseball y niños.
HULEMS: Para terminar esta entrevista, nos gustaría recordar una anécdota que nos pasó cuando estábamos entrevistando a Georgia Beers. Unos días después de haberle hecho la entrevista recibimos un email de Georgia en el que nos decía que se estaba partiendo de risa porque Rachel Spangler le había dicho el nombre de nuestra web traducido al ingles. “There’s a lesbian in my soup!”. ¿Nos puedes contar más de ese momento… por favor?
R.S.: Georgia es una de mis mejores amigas. Cuando empecé en este negocio, básicamente la seguía a todas partes como un perrito hasta que aceptó pasar tiempo conmigo. Vivimos a pocas horas una de la otra, y nos juntamos cada vez que podemos. No estoy segura cómo empezó esa conversación en particular. Creo que nos estábamos mandando mensajes una noche cuando yo le dije que estaba celosa de que la hubierais entrevistado a ella antes, porque me encanta todo lo español y ella ni siquiera habla español. Leí toda la entrevista y me preguntó qué tal había estado. A lo mejor alardeé un poco de que yo podía leerla y ella no (he descubierto de que mi limitado español impresiona a las mujeres que no entienden lo limitado que es). Dije que me había encantado la entrevista, pero que también me encantaba la traducción del nombre de vuestra página. No creo que a Georgia le impresionaran demasiado mis habilidades de traducción, pero el nombre le pareció muy gracioso. También dijo que hacíais entrevistas geniales, lo cual me puso todavía más celosa. Le dije: “Por supuesto que hacen buenas entrevistas. Son españolas. Todo lo que hagan será mejor que la media”. Y entonces hablamos de que soy demasiado fan de todo lo que esté en español.
HULEMS: Entonces, ¿hay una buena relación entre todas las autoras de ficción lésbica? ¿Dirías que es un mundo pequeño y que es fácil hacer amigas en él?
R.S.: Es un mundo pequeño en el gran espectro de las cosas, pero se está haciendo más grande. Cuando yo empecé en esta industria, hace menos de diez años, conocía a todas las autoras de Bold Strokes Books y a la mayoría de las autoras de otras editoriales, pero no creo que sea ya el caso. En muchos sentidos eso es muy bueno porque significa que hay más voces ahí fuera, pero también es triste porque no puedo relacionarme con todas. Como dije antes, soy una persona extrovertida. Quiero ser amiga de todo el mundo.
Pero habiendo dicho esto, creo que, en general, hay buen ambiente entre las autoras. Tengo un buen grupo de escritoras a las que puedo llamar (y llamo) con frecuencia. Hablo con Georgia Beers, Melissa Brayden y Lea Santos/Lynda Sandoval casi a diario. Hay más autoras con las que hablo de manera más o menos regular. Lee Lynch y su mujer Lainie se hospedaron con mi familia en Cape Cod este año. Chris Paynter y yo siempre intercambiamos libros. Creo que es una gran bendición ser capaz de poder llamarnos todas y aprender de las demás. Soy mejor escritora gracias a estas conexiones, por no mencionar cuando nos encontramos en conferencias como The Golden Crown Literacy Society o la Semana de la Mujer en Provincetown, en donde parecemos un puñado de niñas pequeñas pasándoselo en grande. Estoy muy orgullosa de formar parte de esta comunidad de mujeres tan inteligentes y creativas.
HULEMS: Y como ha quedado claro que eres una entusiasta de nuestra lengua y nuestras costumbres, ¿te animarías a mandar a nuestras lectoras un saludo en español? Estamos seguras de que les encantará.
R.S.: I guess it’s probably best to say, “Gracias por leer mis libros,” but I actually know some pretty good pick up lines from my time in Spain and I think one of them fits here too, so for my Spanish readers, “mi corazón que con el tuyo se pierde.”
HULEMS: ¡Muchas gracias por habernos dado esta oportunidad de hablar contigo!