Anatomía de Grey es esa serie que ha conseguido lo imposible. No estoy hablando, por una vez, de normalizar relaciones lésbicas, ni de que a la gente le interese la ciencia. No, no hablo de eso. Me refiero a que jamás en mi vida pensé que la ortopedia pudiera ser sexy. Pero claro, Sara Ramirez ha derrumbado mitos.
Con una carrera plagada de papeles menores, a esta mexicana de pro le llegó su oportunidad de mano de Shonda Rhimes, la todopoderosa reina midas de la televisión estadounidense. Lleva diez años haciéndonos reir y disfrutar en su papel de Calliope Torres. Y cuando digo disfrutar, digo… disfrutar. ¿Habéis visto qué sonrisa? ¿Habéis visto qué mirada? ¿Habéis visto qué…? Ok, ok.
Además de estar buenísima, y esto siempre, SIEMPRE es un plus, en la serie mantiene (¿Mantenía? no lo tengo claro) una relación con otra mujer. La vida nos sonríe, amigas.
Sara Ramírez es nuestra morena del domingo. Pero, hey, nos acordamos de ella más días a la semana 🙂