De vez en cuando hay casos muy paradigmáticos de cómo, casi sin darnos cuentas, las series afectan a los hábitos de consumo de la sociedad. Con El tiempo entre costuras, por ejemplo, se disparó la venta de máquinas de coser por internet; y en Estados Unidos, gracias a Juego de Tronos, el consumo de hidromiel está viviendo su edad de oro.
Orange is the new black, la serie de Netflix que bate records, no iba a ser menos, aunque su caso es mucho más curioso: gracias a Orange is The New Black la venta por internet de ropa interior usada ha experimentado un gran aumento. Vice nos muestra el alto pico de consumo en este mercado digital a partir del 12 de junio, cuando se estrenó la tercera temporada de OITNB en la que se incluye una trama de compra-venta de bragas usadas.
Parece que la popular serie de Netflix no ha conseguido solo que el naranja este de moda por todo el mundo, sino que ha abierto la veda para otro… mercado, un poco menos corriente.
Vía: Vice