Marvel pudo haber hecho una cosa muy guay pero al final no. Esta frase podría aplicarse a un montón de cosas cuando hablamos de Marvel y la diversidad, porque no es que destaquen precisamente en este campo, y estos días nos han dado una nueva razón para volver a usarla.
Por un lado tenemos a los X-Men, un tebeo que siempre se ha identificado con la tolerancia, la diferencia y la aceptación. Por otro una idea genialosa de la organización benéfica Omaze que buscaba unir a los mutantes con la lucha contra el bullying y el acoso escolar por razón de la orientación sexual y la identidad de género.
La campaña consistiría en donaciones de 10 dólares que harían todos aquellos que quisieran. Con el dinero se ayudaría a financiar GLSEN, una asociación que lucha por un espacio escolar sin ningún tipo de discriminación por ser LGBT, y, además, un afortunado donante sería dibujado como uno de los X-Men en alguno de los números venideros, recibiría el dibujo original y una copia firmada del cómic.
Una idea como esta ya se puso en marcha en otras ocasiones dónde el premio era acudir al estreno de los lanzamientos de Marvel cinematográficos más esperados, pero esta vez la cosa no cuajó, a saber por qué porque Marvel no ha dado explicaciones, y los donantes están recibiendo el reintegro de sus dineros.
Vía: Bleeding Cool