Aaaah la fête des amoreux!
A las que no lo celebran… Estoy con ustedes.
Ya, ya, ya sé que es una pendejada, es un día comercial, que es IMPOSIBLE salir, que esto y lo otro.Ya, yo tampoco celebro estas cursilerías, sobre todo porque mucha gente que suele hacerlo aman a su pareja este día y la consienten y el resto del año pues… les da exactamente igual. (¿Esto grita mucho malas experiencias?…)
Pero es que tengo una idea. ¿Qué tal si por una vez nos ponemos cursis este día en particular? Sí, es que es el elemento sorpresa: si no están acostumbradas a celebrarlo, jamás de los jamases se lo va a esperar.
Y a todo esto, ni siquiera tienes que salir de la casa. Por esto de que las reservaciones en cualquier restaurante se hacen con meses de antelación y salir es básicamente un suicidio.
A las chicas que sí suelen celebrarlo… ¡Qué cuchituras!
Solo no olviden que el amor no es sólo un día, por favor.
Les traigo un menú completo, sencillito, ligero y para conquistar, para que a tu chica se sienta consentida y sorprendida.
Y quien sabe… por lo menos una tetica, te ganas.
Vieiras en su concha con mango y jengibre.**
**Esta es súper sencilla, yo las sirvo con un topping mermelada de ají dulce-picante margariteño, pero esa es toda una receta en sí misma que algún día les legaré. Si la encuentran por allá, por casualidad, una mermelada de pimiento, están hechas*
Como entrada, sirvo dos vieiras por persona.
- 100 grs de vieiras limpias (comprarlas limpias de una vez, que no son caras y se ahorran un trabajo delicado)
- Una cucharada de mantequilla
- 3 dientes de ajo, finamente picados
- Unos dos cm de jengibre rallado
- Una cucharadita de perejil
- Un mango pintón. (ni muy verde ni muy maduro, que esté firme)
- Sal y pimienta recién molida
- Dos conchas de vieira
Súper fácil: En una sartén caliente pon a calentar la mantequilla con un chorrito de aceite para que no se te queme y agrega los ajos y el jengibre. Cuando estén dorados echa las vieiras salpimentadas y déjalas dorar de lado y lado. Es importante que no las sobrecocines, apenas cuando estén doradas es hora de sacarlas.
Mientras, filetea el mango. Con un cuchillo bien afilado trata de sacar de la carne un cuadrado de 2mm de espesor, más o menos y lo suficientemente grande como para poner encima de él, la vieira. (No tiene que ser perfecto tampoco)
Lo espectacular de esta receta es su presentación, el contraste del color del mango con la vieira, con el verde del perejil y el punto agridulce y picante de la mermelada de pimiento roja (si la encuentran, ojalá que sí. pero si no, no es razón para no hacerla).
Bien, vas a poner en la concha de la vieira el cuadrado de mango, una vieira encima y vas a rociar con perefil picado fino y un poco de la mantequilla donde sofreiste el bichito. Si tienes la mermelada, le puedes poner un punto justo encima de la vieira.
¡Y listo!
Para no hacerlo demasiado largo, les traigo el principal y el (genial) postre para el próximo post.
Bon apetittie!
PD: Por favor, chicas, que el que le cocines a tu pareja es la cosa más linda del mundo, pero no se olviden de la ambientación también. Unas velas, un incienso, una copa de vino blanco (recomiendo un chardonnay chileno joven para esta receta) bien frío… que sin eso, la cocina se me queda corta.