¡Hola, croquetillas! Este artículo semanal es el primero de una serie de tres, que divido así porque no quiero soltar tres súper tochos, prefiero separar por temática, aunque los tres tienen en común que son sobre los productos en paralelo de ciertos animes.
Hoy quiero hablaros de juegos para móviles de series. Me centraré en dos, que son a los que juego y conozco mejor, pero ya aviso que hay un porrón. El problema es que la mayoría se quedan en Japón. Al no globalizarlos en las tiendas de aplicaciones puedes bajarte la apk por tu cuenta, ya que suelen ser juegos gratuitos de pagos en el propio juego, pero esto tiene varios inconvenientes. Primero, que está en japonés. Segundo, que las actualizaciones son a mano y a veces puedes perder datos. Y es una pena porque a mí me encantaría probar algunos juegos más, como el de Symphogear y el de Toji no Miko.
Love Live – School Idol Festival
Empiezo por este juego por seguir un orden alfabético, no por otra cosa. Ya os lo comenté en otro artículo, pero haré un pequeño resumen. Love Live nace en 2010 como un proyecto de idols. Al comienzo las µ’s no tenían ni nombre en su primer single, se decidió por la votación en una revista. La idea era crear un grupo de idols cuya imagen fuera anime. El grupo fue ganando bastante fama y ya sabéis todas el éxito que han tenido. El anime es parte del producto, pero hay más. Están los conciertos y la venta posterior de sus BDs, los eventos para los fans, los singles… Y un bonito juego para móviles. Gratuito de pagos dentro del juego.
¿En qué consiste? Obviamente, es musical. Te dedicas a coleccionar chicas para formar tu grupo de 9. El objetivo es “actuar”, siguiendo el ritmo de la música debes ir pulsando donde toque. Cuanto mejor lo hagas, más puntos te dan. Si fallas demasiado quizás no completes la canción. La idea es conseguir muchas chicas, porque cada una tiene habilidades diferentes que te ayudarán a la hora de interpretar las canciones. Hay premios de varios tipos para el juego y te van avisando de los eventos de los grupos. También hay bonificaciones por esos eventos. Si os gusta el anime y los juegos musicales tipo Dance Dance Revolution [¿soy muy vieja o se sigue jugando a esto?] o similares, os gustará.
Revue Starlight – Re-Live
Otra que no se limita al anime. La trama de la serie mostraba a las chicas del escenario, su día a día por brillar, representando una obra en paralelo a su propia historia. Bien, aparte del anime hay musicales, porque es lo que tocaba con esta serie. De momento hay dos, he visto el primero, el segundo lo tengo pendiente. Necesito días de 84 horas o una TARDIS.
El primer musical es una reinterpretación del anime donde las chicas se enfrentan entre ellas mientras cantan y actúan. Básicamente te ponen en situación. El segundo es el interesante, no por menospreciar al primero, sino porque entran en juego tres escuelas más con más chicas. Todas muy bollo, sinceramente.
A estas chicas nuevas podemos verlas en el juego para móviles, que también es gratuito y globalizado. Su mecánica es muy diferente, no es musical, es de peleas por equipos. Te toca crear un grupo de 6 que se enfrentará o a unos malos genéricos, que te darán objetos para mejorar el nivel de tus chicas, o puedes jugar también contra otros jugadores. En cualquier caso, la idea es llevar un buen grupo equipado, con habilidades equilibradas y plantear tu estrategia de ataque según las habilidades de las chicas. Sinceramente, está muy chulo.
Bonus Track
Estos los pongo como anécdota, porque me pareció curiosísimo en su momento y aún los conservo. Cuando se popularizó Marimite, los fans crearon unos juegos para PC gratuitos y disponibles, no sé si seguirán online. Se trata del MariBato, juego de peleas en 2D, muy bizarro, y el MariKaku, Maria-sama ga Kakumei [La Virgen María nos ha revolucionado], que es de plataformas.
Ambos muy graciosos con muchos guiños, como en el MariBato que Yumi comparte voz con Rin de Fate Stay Night e invoca a Touko atacando como Archer.
Hasta aquí la primera parte. Nos vemos la semana que viene con un artículo un pelín más largo, motivo por el que separé el artículo en tres entregas.
¡Gokigenyou!